Entre dos mundos
Aventurera y práctica a la vez, la Honda X-ADV rompe moldes y sorprende por su funcionalidad
Los automóviles de tipo SUV o también llamados crossovers están realmente de moda. Son modelos adaptados a un nuevo tiempo en el que los usuarios necesitan un vehículo para todo. Un vehículo práctico para el día a día y que, además, ofrezca ratos de diversión en fin de semana. Pues esto es lo que justamente ofrece la Honda X-ADV. Un scooter realmente práctico, a medio camino entre una moto trail y una moto de ciudad, que toma como base el modelo Integra, pero con una posición de conducción más erguida y elementos que la acercan al mundo off road para conseguir aumentar su polivalencia de forma francamente espectacular.
Su funcionamiento es realmente bueno, y gracias al gran equipamiento tecnológico del que dispone puede circular con gran eficacia y seguridad. Su motor bicilíndrico en paralelo permite unas aceleraciones muy buenas, y se adapta a cualquier situación de conducción con una facilidad inusitada gracias a la caja de cambios de doble embrague automática DCT, en la que el conductor decide gracias a los distintos modos cómo va a conducir. Si se opta por el modo D, su funcionamiento es muy suave y con un consumo realmente contenido, mientras que con el modo S, con tres puntos, ofrece una gran deportividad con un espíritu más transgresor.
La estampa deportiva de su carrocería esconde una parte ciclo un tanto diferente a los scooters convencionales. Y aunque su peso se sitúa algo por debajo de los 240 kilos y
No es una trail o enduro, pero cumple con brillantez su condición de moto multiusos
su asiento está a 820 milímetros de altura, es posible realizar una conducción muy agradable en ciudad y realmente dinámica en carreteras llenas de curvas. Además, el conductor puede circular divirtiéndose por cualquier tipo de vía gracias a la pantalla delantera regulable en altura.