En compás de espera
El frenazo de algunas categorías de fondos en septiembre vaticina un duro último trimestre del año
Hay un compás de espera en los mercados que no solo refleja la incertidumbre del momento en el plano sanitario sino, como consecuencia de ello, el frenazo que han experimentado las previsiones económicas en las últimas semanas, rectificando las hipótesis más optimistas que se habían desplegado durante el mes de agosto. Septiembre está siendo un mes de paralización y escasa actividad en el sector, como lo muestra la escasa aparición de nuevos fondos y de lanzamientos por parte de las gestoras.
Este frenazo es también el resultado de las dudas que han surgido en las últimas semanas entre los bancos centrales más destacados e influyentes, es decir, la Reserva Federal americana y el BCE europeo. Sus últimas reuniones han destacado la dificultad del momento aunque dando por supuesto que mantendrán las medidas de apoyo a las economías y su disposición a mantener políticas monetarias expansivas hasta donde sea necesario.
Los mercados bursátiles han mostrado cierta tibieza en los segmentos en los que parecían resurgir tendencias más expansivas, como los sectores tecnológicos y de salud, ya que el rebrote de los contagios de coronavirus que se ha producido en algunos países europeos y la tardanza que se está produciendo en la aparición de remedios y vacunas eficaces contra la pandemia han extendido las medidas de cautela y la paralización en la reapertura de algunas actividades.
Los mercados se encuentran, en suma, sumidos en una fase de expectación y paralización de actividades económicas, con claras repercusiones en la valoración de algunos sectores. La favorable evolución que se había producido en los mercados de renta variable, sobre todo en Estados Unidos y en algunos tipos de empresas, ha dejado de dinamizar el mercado de fondos de inversión,
Los rebrotes de la pandemia empeoran las expectativas económicas y paralizan la inversión
que a lo largo del mes de septiembre está viviendo una etapa de altibajos.
Resultado de ello ha sido la aparición de fases de tomas de beneficios y el desplazamiento de ahorro desde segmentos del mercado con mayor riesgo hacia fondos con perfil más defensivo, en especial hacia las diversas categorías de fondos de tipo mixto, incluyendo los que asumen riesgos de tipo de cambio.