Las renovables son imprescindibles
Lo dijo el canciller Olaf Scholz: “No podemos depender de los suministros de gas de Rusia y soportar la invasión de Ucrania”. Creo que para que Europa conserve la democracia y la libertad existen cuatro cuestiones esenciales. La primera es que debemos defendernos a través del control de un sistema parecido a los flujos cardiovasculares. Europa puede controlar los flujos de dinero. Si el 85% de la riqueza de Rusia está en manos de los oligarcas, debemos congelar sus transacciones. Es necesario usar el sistema de transferencias Swift, por el que deben pasar todas las transacciones en Europa. Sin su mensaje codificado ningún banco puede recibir o enviar fondos a otros países. El mayor banco de Rusia, Sberbank, tiene filiales en toda Europa, pero están al borde de la quiebra porque no tienen bastante liquidez en euros. Desde el Reino Unido ya se han congelado los activos de tres bancos rusos y los de un numeroso grupo de oligarcas. Uno de ellos ha preferido vender su club de fútbol y recuperar algo de su valor, pero no podrá transferirlo a Rusia. El presidente de EE.UU., en su mensaje a la nación desde el Congreso, ha planteado lo mismo: confiscar las fortunas de los oligarcas que tienen activos en el país. Los bancos rusos ya han sido intervenidos. Las bolsas están sufriendo una volatilidad no deseada, pero la de Moscú lleva varios días cerrada, porque el rublo perdió más de un 40% de su valor y los cajeros automáticos se vaciaron. Los bancos rusos suspendieron los préstamos. Y los tipos de interés suben sin límite.
En segundo término: ¿estamos ante un posible colapso financiero? No, en absoluto. El denominado índice del miedo o ViX es un indicador que cotiza en la Bolsa de Chicago. Cuando se produjo la quiebra de Lehman Brothers en el 2008, el índice llegó a 180. Desde entonces, la media estuvo en torno a 20. La invasión de Putin lo ha llevado a 36, con oscilaciones diarias.
Tercero, Europa entra en la geopolítica. Alemania necesita aumentar el presupuesto militar para modernizar sus ejércitos. Debemos estar preparados, dijo el canciller, para defendernos de Putin. Alemania dedicará un 2% de su PIB al nuevo gasto militar. Defenderá los mares del Norte y el Mediterráneo. Este año destinará un presupuesto adicional de Defensa de 100.000 millones de euros.
Cuarto: lo hacemos para defender la democracia y la libertad. No dependeremos de los suministros de energía actuales. España tiene seis estaciones para recibir gas licuado y gasificarlo. Alemania las construirá en sus grandes puertos y promoverá las energías renovables, que son una garantía de libertad.