Sanciones por la picaresca
Rebajar la factura fiscal con artimañas o pensando que la Agencia Tributaria no está al tanto de las actividades que se realizan puede salir caro. Intentar librarse del pago de impuestos por la vivienda alquilada a turistas puede conllevar sanciones que parten del 50% en casos graves sobre la cuota defraudada que corresponde por ingresos no declarados, recuerdan desde Gestha. Se puede reducir la cantidad en ciertas situaciones, como en casi todas las sanciones tributarias, como por conformidad en el pago. Y que la persona a la que se alquile la vivienda no sea española o residente fiscal poco tiene que ver. “Hay personas que creen que un alquiler que se alquila a un turista extranjero sin vinculación con el país puede pasar desapercibido”, pero los intercambios de información entre intermediarios y Hacienda funciona bien. Además, hay que tener en cuenta que cada vez se pone más el foco en los rendimientos de los alquileres, tal y como quedó patente en la última presentación de la campaña de la renta que aún está en marcha, donde también se citaron las criptomonedas o las rentas en el extranjero como fuente de alertas al contribuyente.