La policía registra la sede de los Mossos
Un juez ordena que se copien todas las escuchas telefónicas de un caso porque sospecha que se le ocultaron datos
Funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía entraron ayer en la central de los Mossos d’Esquadra en Sabadell para copiar en un disco duro las intervenciones telefónicas de una investigación llevada a cabo por la policía autonómica. Esta actuación viene determinada por la sospecha del juez de que se le ocultaron conversaciones relevantes en un caso de narcotráfico.
La entrada fue ordenada por el titular del juzgado de instrucción número 1 de Barcelona, Joaquín Aguirre, quien se personó también en la sede policial para llevar a cabo la diligencia. Se trata de una compleja investigación, que se inició en marzo de 2009, con la aprehensión de un alijo de cocaína por parte de la Guardia Civil.
Según el atestado, la partida era de 50 kilos, pero al final resultó que tan sólo había uno de cocaína, siendo el resto sustancias inocuas. El asunto acabó derivando hacia las relaciones de un confidente con miembros de las fuerzas de seguridad, y en este momento hay imputados varios guardias civiles y mossos d’esquadra, entre los cuales se hallan seis miembros de la Unitat Adscrita de la policía autonómica, a quien acusa de ocultar datos relevantes
Durante cinco horas, el juez y los policías copiaron datos de los ordenadores centrales del cuerpo autonómico
y que es el origen de lo ocurrido ayer.
Uno de los asuntos que están en discusión es si la totalidad de las escuchas telefónicas fueron entregadas en el juzgado. En esta causa está personado como acusación particular el sindicato ul- traderechista Manos Limpias, que llevó a cabo un peritaje según el cual faltaban 3.000 conversaciones y SMS. A la vista de esto, el fiscal anticorrupción elevó un escrito al magistrado en el que ponía de relieve que este resultado “suscita una lógica preocupación” y que había que verificar si dichas diferencias “eran reales” y y, si en el caso de que existieran, se trataban de un acto intencional o de un error técnico. Para ello, pedía que se nombrara a funcionarios públicos para efectuar esta verificación y que estos fueran agentes de las unidades centrales del Cuerpo Nacional de Policía o de la Guardia Civil.
El pasado junio, el juez Aguirre ordenó que la División Económica y Técnica (Sitel) del Cuerpo Nacional de Policía se encargara del trabajo, en el que no sólo se incluye esto sino también transcribir la totalidad de las conversaciones y SMS intervenidos en su día. El viernes, el magistrado dictó una providencia para que los agentes, junto con la comisión judicial, volcaran en un disco duro “una copia íntegra” de todo el material audiovisual incluido en las pesquisas. En este escrito, Aguirre señala que los DVD aporta- dos en su día por los mossos “tienen errores, procedentes de fuertes rayaduras, perfectamente advertibles a simple vista”.
A primeras horas de la mañana de ayer, el juez Aguirre y funcionarios del Sitel se personaron en el complejo Egara, la central de los Mossos ubicada en Sabadell, y durante cinco horas estuvieron en la sala donde están los medios técnicos de la policía autonómica para copiar de su ordenador central el material requerido. Es una actuación sin precedentes, llevada con sigilo hasta el momento de producirse de la que sólo fueron informados los funcionarios que debían llevarla a cabo.