Cada vez más único, grande y libre

l Gran Wyoming (la “Susanna Griso de La Sexta”) está que se sale. A nadie debería escapársele, y aquí y ahora menos que nunca, que hay otras Españas, pero están en esta. Más intermediáticamente incorrecto que nunca, las envenenadísimas perlas que el Gran Wyoming y su equipo han ido encadenando durante los últimos días a propósito de los muchos despropósitos informativos que los de la celtibérica caverna han venido lanzando contra Catalunya y los catalanes de a pie desde el pasado 11-S, se cuentan entre lo mejor y más inspirado que un servidor ha visto en la pequeña pantalla en todos estos meses. Mi preferida: “Si los manifestantes hubiesen llevado un toro, TVE les habría dedicado hora y media...¡y en horario infantil!”

Plenamente convencido de que el humor a quemarropa es la mejor arma que existe para mojarles a lágrima viva la pólvora a los incendiarios telepredicadores de, por ejemplo, 13tv e Intereconomía, el Gran Wyoming, asumiendo hasta las últimas consecuencias su paródico papel como reaccionario Pedro Jota con tirantes, no ha dejado de quitarle hierro al difícil momento que atravesamos bromeando incluso a nuestra independizable costa. Y eso le honra, por mucho que algunos puedan llegar a malinterpretarle más o menos simultáneamente por eso del imaginario fino. Así, tras afirmar que “los chistes de catalanes agarraos son más antiguos que la Diada”, o asegurar que el verdadero himno oficial de Catalunya no es otro que el jaleable “Madrid, cabrón, saluda al campeón” del exbarcelonista Samuel Eto’o, el Gran Wyoming no dudó en señalar, vídeo retuneado inclusive, que el solemne discur- so de Artur Mas contó con el apoyo incondicional de una de nuestras catalanas más universales e ilustres: una Carmen de Mairena que, según él, lo tiene todo para ser la monarca perfecta de una futura Catalunya independiente: “No se le entiende al hablar y tiene mucho tiempo libre”. Igualmente memorables sería su broma a propósito de una hipotética soberanía fiscal (“Vaya lío que se va a hacer Arantxa Sánchez Vicario. No va a saber si defraudar a la Hacienda española o a la catalana”), o su llamamiento a la reflexión sobre todo aquello que realmente nos une a los unos y a los otros (“A ninguno nos hace ni puta gracia los chistes de Pepe Reina”). Y todo ello sin dejar de sacarle punta a la entrevista de trapo de Rajoy, al tema del resacón en Eurovegas, o a los efectos colaterales de la visita de Merkel a Españistán.