Un hotel con vistas
El Hotel Villa Paulita, en Puigcerdà, la capital de la Cerdanya, ocupa en la actualidad lo que a comienzos del siglo XX fue una casa de recreo de la burguesía barcelonesa. Situada en un enclave privilegiado, junto al parque Schierbeck y al borde de un lag
Villa Paulita se construyó, igual que el resto de palacetes colindantes, en el tránsito del siglo XIX al XX. De aire afrancesado, el palacete está marcado por sus techos de pizarra, la escalinata de su entrada y su fachada en color terracota que contrasta con detalles decorativos de color crema. Además de la edificación, que tenía un semisótano, planta baja, dos plantas y una torre, la villa contaba también con un gran jardín y un antiguo establo.
Adquirida en 1920 por el industrial textil Ramón Volart, la villa recibió el nombre de su esposa, Paulita, y la transformación de esta villa en hotel se realizó un siglo después de su construcción, respetando al máximo la estética original y buscando el máximo confort.
Hotel con encanto
Las antiguas carboneras, cocinas y planchadores del semisótano son hoy los espacios del spa (provisto de jacuzzi, pisci-
na, sauna, hammam, gimnasio y lucernarios), mientras que los comedores de la planta baja se han transformado en lounge bar
as habitaciones del hotel han sido diseñadas para mantener la calidez y el recuerdo de tiempos pasados con la comodidad contemporánea, pero conservando su encanto y unas espléndidas vistas al lago y los picos del Pirineo. En el antiguo establo, del que se conserva una sólida estructura de madera, se encuentra hoy el restaurante LEstany, donde la cocina tradicional de la comarca y de tem- porada, hacen las delicias de los paladares mas exquisitos.
Un lugar para escaparse.
El Hotel Villa Paulita acoge viajeros que huyen de las grandes urbes para perderse en la naturaleza y encontrar relax y tranquilidad. La gran oferta de actividades que se pueden realizar en la comarca son infinitas, con- templar la arquitectura románica, descubrir la montaña caminando a través de sus bosques o volando en globo, como disfrutar de la gastronomía y cultura de sus gentes. El abanico de actividades lúdicas también es muy amplio, con opciones de esquí, golf, ciclismo, equitación, entre otras. Toda una experiencia inolvidable.
El Hotel ofrece distintos paquetes de escapadas relax o románticas, así como asesoramiento para cualquier actividad que pueda imaginar. Los escasos cien metros que separan el Villa Paulita del centro de Puigcerda nos descubrirán su variado comercio, boutiques de moda y accesorios, así como res- tauración y ocio para todas las edades. Las instalaciones del hotel nos permiten celebrar todo tipo de eventos, bodas, convenciones, reuniones, encuentros familiares y todo ello organizado a su medida en un entorno inigualable.
Villa Paulita es un lugar perfecto para descansar, tras disfrutar de las actividades y deportes preferidos de cada uno de sus huéspedes.
Hotel Villa Paulita, es seguramente uno de los hoteles más. emblemáticos y lujosos L de la Cerdanya.