La investigación se cobra otros dos ceses por el Madrid Arena
La alcaldesa fulmina a dos cargos de la empresa del recinto
Dos nuevas fichas del dominó municipal cayeron ayer a raíz de las investigaciones abiertas por la muerte de cuatro jóvenes en la macrofiesta del Madrid Arena. Se trata del consejero delegado de la empresa pública Madrid Espacios y Congresos, José Rivero, y del director gerente de la sociedad, Jorge Rodrigo. Ambos fueron destituidos por la alcaldesa madrileña, Ana Botella (PP), por “pérdida de confianza”.
El motivo de dicha pérdida se encuentra en un documento que habrá de ser entregado en el juzgado que investiga la avalancha, en el que se adquieren compromisos de preferencia con la empresa Diviertt, la que organizó el macrofestival. La alcaldesa descono-
Los abogados de las víctimas estudian pedir que se impute a más responsables del Ayuntamiento
cía que se hubiera suscrito ese acuerdo con dicha sociedad privada, cuyo representante, Miguel Ángel Flores, declaró el pasado martes ante el juez, derivando toda la responsabilidad hacia el Ayuntamiento. Posiblemente fue el propio Flores quien desveló al juez la existencia de ese convenio con el municipio. El propio Ayuntamiento dio a conocer ayer el dato de que el compromiso de fidelización se había firmado el pasado día 21 de septiembre y que contenía una serie de condiciones preferentes para la utilización del pabellón Madrid Arena este año y el que viene.
El Ayuntamiento quiso aclarar, no obstante, que este contrato no supone irregularidad alguna y que existen precedentes. El problema es que su firma no fue comunicada a nadie por los gestores del Madrid Arena. “La ocultación de esta información –sostuvo la alcaldesa– supone una grave falta a la confianza depositada en ellos para desempeñar dichos puestos”. Ana Botella subrayó que en la investigación del caso no permitirá que “nadie falte a la verdad u oculte información”.
La oposición, a su vez, elevó el tono de las críticas ante estos ceses. El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, dijo que la alcaldesa debe dimitir ya después de que tres responsables municipales –el tercer teniente de alcalde, Pedro Calvo, al ser imputado, y los dos de ayer– hayan tenido que abandonar sus cargos. “Hay ya tres personas que asumen la responsabilidad que tiene el Ayuntamiento en este caso, algo que siempre hemos mantenido. Tres dimisiones, y las que estén por llegar”, manifestó Lissavetzky.
Esta tesis encuentra apoyo en las intenciones expresadas ayer por los abogados de las víctimas de la avalancha, que anunciaron que estudian pedir la imputación de otros cargos municipales. Se trata del delegado de Medio Ambiente, Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento, Antonio de Guindos –hermano del ministro de Economía, Luis de Guindos– y del jefe de la policía municipal, Emilio Monteagudo. Y tampoco descartan formular acusaciones contra el vicealcalde de Madrid, Miguel Ángel Villanueva, que fue quien llevó a cabo las primeras comparecencias tras la tragedia, trasladando que sus informaciones eran que el aforo no se había sobrepasado. Finalmente, ayer declaró Carlos Manzanares, representante de la empresa de seguridad Kontrol 34. Dijo que sus empleados actuaron en la macrofiesta sólo “como azafatos”.