El homenaje a Navarro no podía acabar mal
Remontada del Barça Regal tras un pésimo segundo cuarto
Siete partidos, siete victorias. El Barcelona Regal, único imbatido de la Euroliga, es enormemente superior al Lietuvos Rytas, colista del grupo, pero ayer se empeñó en disimularlo en un segundo cuarto horroroso (15-27) que le obligó a remontar. En el último se vio toda la distancia.
No hay nada que pueda inmiscuirse en la justificada devoción que el Palau Blaugrana siente por Juan Carlos Navarro, pero durante un rato pareció que sus compañeros podían aguar el homenaje al capitán por los 15 años de su debut en el primer equipo, que se cumplen hoy. Lo cual no impidió acabar con un tremendo 82% de acierto en tiros de dos (27/33).
El primer cuarto fue normal por la diferencia en el marcador, no en que los azulgrana estaban bastante mejor en ataque que en defensa: 27-18 a los 10m, con 9 puntos de Navarro y otros tantos de Tomic y sin un triple ni un tiro libre visitante. Pero lo del segundo fue una sorpresa desagradable, porque ni un arbitraje ridículamente casero, al estilo del de hace 30 años, evitó que el Barça Regal se viera superado (39-41 por primera vez, 42-45 en el descanso) tras tardar 4m 40s en anotar una canasta, perder muchísimos balones (11 en la primera parte, 19 en total) y permitir que los lituanos se llevaran demasiados rebotes ofensivos (10 hasta el descanso, 14 al final). Tras esos 20 primeros minutos, un tiro libre de Wallace era toda la aportación de los seis suplentes locales.
Pero el homenaje a Juanqui no podía acabar mal, del mismo modo que no podía prolongarse mucho aquella igualdad tan ficticia. Lo hizo durante medio tercer cuarto con un intercambio de canastas que retrasó hasta el minu- to 26 la recuperación del mando por parte de los locales (55-54). El empate a 56 fue el último y aunque el Barça Regal tardó 32m 11s en superar su mayor ventaja anterior (23-12 y 72-60) de ahí al final el partido fue una masacre.
Los lituanos, exhaustos, se olvidaron rápidamente de las ilusiones de dar la campanada para pensar sólo en que aquello acabara cuanto antes. Navarro se despidió con 8 puntos seguidos, inclui- dos dos triples, el segundo de ellos prodigioso, y se fue a falta de 3 minutos entre una gran ovación comparable a la que había recibido antes de empezar. Dejaba como detalle 24 puntos en 32 minutos, con 5/6 de dos, 3/6 triples y 5/6 tiros libres. Otra faena marca de la casa, que junto al hundimiento físico de los lituanos acabó inspirando a sus compañeros para completar la paliza con un 34-10 en los últimos 13 minutos.