“La programación traduce los deseos del usuario en órdenes al sistema instalado”
Jónatan Herranz fundó hace 10 años la empresa Controlbyte, con la que desde entonces ofrece servicios de programación de sistemas de control para un gran número de empresas integradoras e instaladoras del mundo audiovisual y domótico. Hace poco más de un año se incorporó además a Lafarga & Herranz, donde sumó sus conocimientos y experiencia a los ya aportados por sus nuevos socios. La siguiente entrevista nos acerca a su trabajo. Cuéntanos ¿A qué os dedicáis exactamente en Lafarga & Herranz?
Tenemos dos campos de actuación principales: los audiovisuales (alta fidelidad, salas de cine y audio/vídeo profesional), que es verdaderamente el campo de experiencia de mis compañeros; y la domótica residencial y el control o integración audiovisual, que desde hace ya un tiempo se vio como algo necesario a ofertar, más que como un valor añadido.
Tenemos tienda propia abierta al público, donde vendemos productos de highend, con una recién remodelada sala en la que podemos hacer demostraciones tanto de tecnología como del tipo de instalaciones que realizamos.
¿Qué perfil de cliente tenéis en cada línea de negocio? ¿A quién os orientáis?
Hasta hace unos años, el cliente mayoritario de Lafarga & Herranz eran personas de alto poder adquisitivo, debido a la exclusividad del producto de alta fidelidad en cuanto a precios y a que la domótica se consideraba un lujo y ostentación. Poco a poco, va apareciendo un tipo de cliente que conoce las ventajas del confort y ahorro energético que aportan los sistemas domóticos y que, además, está bastante informado de lo que existe en el mercado en cuanto a marcas y/o tecnologías. Un cliente que, en muchos casos, ya sabe muy bien lo que quiere.
También se ha incrementado más la valoración en el servicio, desde la preventa hasta la postventa, que en las propias prestaciones de los productos. Ya no se trata sólo de vender máquinas a mejor precio que los demás…
Tras mi incorporación a la firma, he aportado como clientes a empresas de nuestro mismo sector -incluso podrían considerarse competencia directa-, a las que ofrecemos servicios de programación.
Entonces, ¿Vuestro valor diferencial está en el servicio?
Intentamos que sea así y creemos que es la única forma de lograr esa diferenciación. No podemos hacerlo entrando en una guerra de precios con la competencia. Queremos distinguirnos por la calidad del producto suministrado, por el trato al cliente y la personalización total de la instalación. Para ello, exigimos continuamente el máximo a las marcas con las que trabajamos y a las empresas de industriales que colaboran con nosotros para ampliar nuestra oferta de servicios.
¿Os distingue también la tecnología?
Tenemos la ventaja de ofrecer directamente el servicio de desarrollo de software. Creamos aplicaciones totalmente personalizadas para tablets u otro tipo de interficies y las mantenemos con el paso del tiempo, ajustándolas a las novedades que aparecen, a sustituciones de equipos o a cualquier nueva necesidad del cliente. Y es que la programación, que es parte fundamental de todo el proyecto, es la que traduce los deseos del usuario en órdenes al sistema instalado, y todo de la forma más simple e intuitiva.
Pregunta obligada: ¿Cómo os ha afectado la crisis del sector de la construcción?
Es cierto que han caído considerablemente los proyectos de domótica en nueva vivienda pero, por otro lado, ha crecido la petición de presupuestos en rehabilitación. Hemos logrado entrar en otros sectores, como por ejemplo el de la restauración u otros, en los que se concede mucha importancia al tema del ahorro energético y a la facilidad de uso de los sistemas instalados por parte del personal, que no tiene necesariamente que saber nada de tecnología.
Y actualmente, ¿Qué ofrecéis a quien esté interesado en equipar su vivienda con domótica?
El punto de partida es hablar con el cliente final o la dirección facultativa para conocer de primera mano sus necesidades reales (control de iluminación, climatización, persianas y/o cortinas, audiovisuales, seguridad, simulación de presencia, control externo...) y el grado de sencillez de uso que deberemos implementar. Después, desarrollamos un proyecto ajustado al presupuesto y a las exigencias del usuario, hacemos la instalación del cableado y de los equipos, diseñamos y creamos el software que permita controlar la vivienda y, finalmente, realizamos la puesta a punto de toda la instalación, corrigiendo posibles anomalías o cambios de última hora. También ofrecemos un mantenimiento posterior pensando en nuevas o futuras necesidades y actualizaciones tecnológicas.
Podemos ofrecer un paquete llave en mano, pero entramos también en proyectos en los que sólo se requiere parte de los servicios que ofertamos.