Hacienda y Madrid recrudecen las hostilidades por la financiación
Montoro cree que Ignacio González quiere ser candidato batallando con su ministerio
“Ya no se respetan ni el espíritu navideño”. Ese fue el comentario de un dirigente del PP al conocer el cruce de críticas que ayer se intercambiaron el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González. La hostilidad declarativa sorprendió tanto en el PP como en el Gobierno, ya que pese a ser conocidas las diferencias que mantienen ambos –peor aún es la relación entre el presidente madrileño con el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta– en las filas populares no se esperaban un intercambio de tiros del calibre de los que se utilizaron ayer.
La Comunidad de Madrid fue la única que la semana pasada votó en contra de la transferencia a las autonomías de la recaudación del impuesto de Patrimonio, que Madrid no cobra; y en agosto se opuso al déficit asimétrico impuesto por el propio Mariano Rajoy. Pero ayer, Ignacio González no digirió de buen grado las palabras del titular de Hacienda en un Expansión y que apuntaban directamente contra Madrid y su presidente: “Madrid no puede decir que estoy haciendo lo que no estoy haciendo. Yo creo que su presidente está equivocado y piensa que en este ministerio está la ventanilla para que le hagamos candidato, y no es así”.
Cristóbal Montoro cree que con sus enfrentamientos con Hacienda, lo que pretende el presidente madrileño es ganarse el fa- vor de los madrileños, de cara a su candidatura, pero está convencido de que “los madrileños no se creen el discurso de que un Gobierno del PP le quita el dinero a Madrid para dárselo a Catalunya. Eso es bastante absurdo”. Es más, rechaza la premisa que Madrid mantiene de que es uno de los territorios más solidarios en España. La explicación del minis- tro es que Madrid emplea un concepto de la solidaridad “completamente equivocado”, y eso porque “no hay solidaridad en el pago de los impuestos: cada uno paga en función de su capacidad económica. Los impuestos están para garantizar la igualdad de acceso a los servicios”.
El gobierno de Ignacio González no está dispuesto a aceptar lecciones del ministro. No asumen la disciplina de partido en los Consejos de Política Fiscal y Financiera y tampoco lo hizo ayer. Tras la reunión del Consejo de Gobierno, el consejero de la Presidencia y portavoz, Salvador Victoria, devolvió las críticas al ministro, y munición del mismo nivel. Victoria achacó las palabras del ministro a que “ha sido un final de año complicado para el ministro de Hacienda por es-
EL MINISTRO ACUSA... “Los proveedores de la Comunidad de Madrid se quejan de que no les están pagando” ...Y MADRID RESPONDE “Es un final de año complicado para él por el escándalo de la Agencia Tributaria” NO TAN SOLIDARIOS El ministro cree que Madrid usa un concepto erróneo de solidaridad
cándalos como el de la Agencia Tributaria a cuenta de Cemex”, lo que provocó el cese en cadena de directivos de la Agencia. Pero no se quedó ahí. El portavoz del Gobierno madrileño encuadró las críticas a la Comunidad de Madrid en “las amenazas y chascarrillos permanentes” con los que se ha referido tanto a “los medios de comunicación como al mundo de la cultura” sobres supuestos problemas económicos o deudas con Hacienda.
El consejero menospreció los mensajes del ministro, convencido de que los madrileños “tienen la tranquilidad de que tienen un programa electoral que se cumple”. Sólo le faltó decir, cosa que el Gobierno central no hace, aunque quedó claro cuando recordó que el Ejecutivo madrileño congela y anuncia rebajas de impuestos mientras que el del Estado los sube. Y es que Montoro, que ya en su día criticó la bajada de impuestos anunciada por Ignacio González también está molesto porque Madrid no acudió al Fondo de Liquidez Autonómica –tampoco lo hizo Galicia– y luego “los proveedores de esas comunidades autónomas se me quejaban porque no les estaban pagando”.