La política, la forma más alta de caridad
El papa Francisco ha alertado del desprestigio actual de la política y de la necesidad de revertirlo, ya que “la política es la forma más elevada de la caridad social”. Tal idea, escrita en la doctrina social de la Iglesia, la utiliza a menudo para interpelar a los políticos a paliar la desigualdad y las injusticias.
No se puede negar que, en el lenguaje del siglo XX, Francisco está más a la izquierda que a la derecha, aunque critique tanto el comunismo como el capitalismo, como también los critica la doctrina social católica. El primero porque invalida el anhelo de otra vida arguyendo que es un opio que paraliza al hombre en ésta, que lo hace conformista. Según Francisco en Sobre el cielo y la tierra, “El hecho de una recompensa ulterior no exime al hombre de luchar por los derechos personales, sociales, éticos... Si una persona aguanta sin luchar por sus derechos pensando en el Paraíso, en efecto está bajos los efectos del opio”. La perversión del segundo, el capitalismo, según Francisco, es que domestica a la religión para que no moleste tanto, la mundaniza: “Algo así como ‘Pórtate bien, haz algunas fecho- rías pero no tantas’... buenos modales y malas costumbres: consumismo, hedonismo, arreglo político entre las potencias o sectores políticos, el reino del dinero”.
Otro vicio de la política es presentar las cosas en blanco y negro, “una tendencia pecaminosa que privilegia el conflicto sobre la unidad”. Al contrario, asegura Francisco, la humildad allana los caminos para el encuentro, “y el espíritu de Dios se manifiesta en ese allanamiento”, según expresa el profeta Isaías (40,3-4)
En la misa del 16 de septiembre, recordaba a los políticos un pasaje de Lucas (7,1-10) en que un romano poderoso pide a Jesús que cure a su criado. Ese personaje muestra humildad y “amor a su pueblo”. Un gobernante antes de asumir responsabilidades “debe hacerse dos preguntas: ¿yo amo a mi pueblo para servirle mejor? ¿Y soy humilde para oír las opiniones de los demás a fin de elegir el mejor camino? Si no se hacen estas preguntas, su gobierno no será bueno”.