Cierra la edición en papel de ‘La Gaceta’
El rotativo clausura su versión impresa aunque de momento mantendrá el formato digital
Una portada singular y polémica (véase la foto junto a estas líneas) es la última presentación de La Gaceta de los Negocios en los quioscos. A partir de hoy, el diario ya no saldrá a la calle en su edición de papel, según explicaron ayer fuentes de la redacción del rotativo.
La noticia del cierre fue comunicada por la dirección del diario ayer por la mañana a los cerca de setenta trabajadores que se verán afectados por la clausura de este medio de comunicación, y que tienen todavía seis nóminas pendientes de cobrar, según explicaron.
Las mismas fuentes señalaron que está previsto que La Gaceta siga saliendo en una edición digital.
La Gaceta estaba dirigida desde el pasado mes de mayo por uno de los fundadores de La Razón, el periodista José Antonio Fúster, que sustituyó en el cargo a José Javier Esparza, quien se mantuvo como corresponsal diplomático y ayer abría el diario con una crítica al mensaje del Rey.
En el 2009, el periódico económico La Gaceta de los Negocios, nacido en los años ochenta, se convirtió en diario gene- ralista, y pasó a ser conocido simplemente como La Gaceta, tal como destacaba su cabecera tras la adquisición del grupo Negocios por parte de Intereconomía, grupo que preside Julio Ariza.
La Gaceta de los Negocios redujo su distribución en noviembre pasado y ya sólo era posible encontrarla en Madrid, mientras que en el resto de España dejó de tener presencia en la mayoría de los puntos de venta.
Las últimas cifras de La Gaceta en la Oficina de Justificación de la Difusión (OJD) eran de 16.000 ejemplares. Desde septiembre pasado se desconocían sus datos de distribución.
En los últimos años. una de las características de La Gaceta han sido sus portadas llamativas y en muchos casos polémicas. Hace sólo unos días, con motivo de la aprobación del anteproyecto de nueva ley del aborto, tituló: “Matar vuelve a ser delito en España” y sobre el reciente funeral de Nelson Mandela, el titular fue un lacónico “tres cuartos de entrada”.