El presidente deja la ley del aborto en manos de las Cortes
Feijóo reclama a su partido un esfuerzo por el consenso
Defensa del anteproyecto de ley del aborto, pero dejando la puerta abierta a cambios en el Parlamento, no en los trámites que aún quedan para la aprobación de la ley por parte del Gobierno. Ante las críticas suscitadas por el texto visto por el Consejo de Ministros, Mariano Rajoy quiso dejar claro ayer que el Ejecutivo hace su yo el proyecto del ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallar-
LA DEFENSA “Es una ley equilibrada y que está en la línea de la aprobada en 1985”
OPOSICIÓN INTERNA El presidente de la Xunta se suma a las voces críticas en el PP con la norma
dón, pero tampoco le dio carácter de definitivo. Rajoy definió la reforma como “equilibrada”, pero reconoció que genera “posiciones diferentes en mi partido y en otras formaciones políticas”.
A pesar de las insistentes preguntas de los periodistas, el presidente del Gobierno no citó la nueva regulación legal de la interrupción del embarazo ni por su nombre más popular, ley del aborto, ni por la denominación que le ha dado el Consejo de Ministros: ley de protección de la vida del concebido y derechos de la mujer embarazada, Rajoy se limitó a subrayar que supone “una regulación de una manera equilibrada, y que está en la línea de la ley aprobada en 1985”. El presidente se amparó en la ley que hizo Zapatero en el 2010 para justificar el cambio emprendido. Rajoy destacó que el Gobierno del PP no cambió la ley de 1985 cuando llegó al Gobierno en 1996, y lo que ahora hace la nueva ley es volver a una regulación “en la línea de la aprobada en 1985, que estuvo en vigor hasta el 2009 y que luego, sin anunciarse en ningún programa electoral, fue modificada en el 2010”. La que está llevando a cabo el Gobierno, por el contrario, destacó Mariano Rajoy, estaba en el programa electoral del PP.
Sobre los cambios que se demandan al texto impulsado por el ministerio de Justicia, Rajoy no se pronunció. De hecho, dejó la puerta abierta: “La ley es del Parlamento, y es el que toma decisiones”. Lo que sí hizo fue limitar el alcance político de las discrepancias que el anteproyecto ha provocado en el seno del PP: “Este es un asunto que a veces produce posiciones diferentes en mi partido y en otras fuerzas políticas”.
El presidente se refería a las voces discrepantes que han surgido en los últimos días y a las que ayer se unió el presidente de la Xunta de Galicia. Alberto Núñez Feijóo, alentó a los partidos a avanzar en la senda del diálogo para conseguir “posturas mucho más próximas”. “Es un asunto de una enorme complejidad política, jurídica y moral. Sería bueno para todos tener una legislación apoyada mayoritariamente en las Cortes”, añadió Feijóo.
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, también se mostró partidario de avanzar sobre el texto presentado por el Gobierno la semana pasada para “recupe- rar el consenso, bastante mayoritario, de 1985”. “Si realmente es así, yo estaré a favor”, dijo el también senador del PP.
En la Diputación Provincial de Ourense, los diputados del PP rechazaron ayer una moción socialista en contra del anteproyecto de la nueva ley del aborto con el pretexto de que “aunque es muy restrictiva, seguro que se mejorará” en su trámite parlamentario.