Barcelona estrena su primera calle con energía eólica y solar
Barcelona tiene ya una calle autosuficiente, una calle que se ilumina gracias a la energía eólica y solar, una auténtica declaración de intenciones, una vía que seguir. Se trata del camino de Finestrelles, en el distrito de Les Corts, a las puertas de Collserola, donde la ciudad comienza a diluirse y confundirse con la naturaleza.
Allí, una pequeña instalación eólica equipada además con diversas placas fotovoltaicas aprovecha el viento y el sol, genera y almacena desde hace pocos días electricidad suficiente para que diez postes de luz iluminen el sendero que comunica el casal con el parque, para que acerquen la urbe a la montaña y vertebren un poco más el barrio de la Mercè sin provocar contaminación lumínica.
La inversión a cargo del Ayuntamiento es de sesenta mil euros. Al parecer, instalar allí una línea convencional hubiera resultado más caro. El teniente de alcalde de Hábitat Urbano y concejal de Les Corts, Antoni Vives, asegura que el camino de Finestrelles no será una mera anécdota, un brindis al sol y al viento de cara a la galería.
“Nuestro objetivo es que este tipo de iniciativas se extienda por toda la ciudad a fin de hacer de Barcelona una ciudad autosuficiente y sostenible en la medida de lo posible. Esto no es una experiencia piloto. Es el principio de un plan que queremos desarrollar. Barcelona dispone ahora de un mapa eólico y queremos aprovecharlo”.
El concejal añade que los márgenes de la ciudad son muy apropiados para este tipo de iniciativas muy respetuosas con el medio ambiente. “Pero también queremos extenderlas a otros espacios mucho más poblados y tran- sitados”. Son palabras que pueden despertar cierta incredulidad dadas las dificultades administrativas que padecen muchos particulares que quieren aprovechar las energías renovables para fines domésticos.
“Sí –admite Vives–, el modelo energético actual no favorece el uso de las energías renovables. Es necesario que las administraciones y las empresas del sector se planteen un cambio del statu quo. Barcelona ya está dando sus pasos desde el ámbito local, traba-
Se ultima un plan para iluminar de forma autosuficiente parques, patios de manzana y calles
jando en la medida de nuestras posibilidades”.
De este modo, prosigue Vives, el Ayuntamiento ultima los detalles de un proyecto para iluminar de una manera autosuficiente y sostenible un buen puñado de parques, patios de manzana y algunas calles de toda la ciudad. La primeras de estas luces, no obstante, no se encenderán hasta dentro de un año. “A la postre acabaremos empleando estos sistemas de iluminación autosuficientes y sostenibles en los espacios más céntricos”, adelanta.