“Hay que aprovechar la inercia del campeón”
Manolo Cadenas, seleccionador español de balonmano
Manolo Cadenas ( Valdevimbre, León, 1955) se estrena hoy en el Europeo ante Hungría (18.15h) como seleccionador en campeonato oficial después de heredar el equipo campeón del mundo que dejó Valero Rivera. Una carga que no altera lo más mínimo a este trotamundos que pretende dar continuidad a la obra de su predecesor, según explicaba a La Vanguardia.
¿Cómo compagina su equipo del Wisla Plock y la selección? Más o menos como los jugadores. Estoy en contacto con el director técnico y con Chechu Villaldea para seguir a los jugadores, presencialmente o por internet –por suerte, casi todos los partidos están grabados– y a cambio tengo menos tiempo libre.
¿Seguir con su club era una de las condiciones para hacerse cargo de la selección? No era una condición. Yo ya había aceptado el trabajo de Polo- nia. Y además era una cuestión económica: la Federación Española cambió totalmente la asignación económica; ahora al seleccionador se le paga de otra forma. Hay que adecuarse a la situación económica de la Federación y del balonmano y se bajaron bastante las asignaciones.
En su primer torneo confía en el bloque del Mundial... He querido mantener lo que funciona para que siga la inercia. Los cambios son obligados por las circunstancias. Prácticamente todos los que ganaron el Mundial debían seguir.
Sorprende la ausencia de Juanín. Lo llamó en las dos primeras convocatorias y nunca más. En aquellos momentos creía oportuno que viniese, y ahora también podría estar, pero tomo decisiones pensando a largo plazo. Juanín debía haber estado en otros campeonatos, pero ha pasado un tiempo y hay un futuro en Brasil (los Juegos del 2016) donde es difícil que pueda llegar en buena forma. Más que nada por la edad (tiene 36).
¿Heredar un grupo campeón del mundo le hace sentirse más obligado a lograr medalla? Siempre me siento presionado para sacar lo máximo al equipo. Ser campeón añade aún más obligación, porque mantenemos el blo- que y la esencia de campeón siempre hay que mantenerla. España lucha para estar entre los mejores y como fue el mejor en el último torneo, con más motivo.
En el Europeo 2012 España fue 4.ª. ¿Usted qué se exige?
“Espero un equipo que siga como hasta ahora: con una gran defensa y una intensidad única” “No creo que la selección sea la gran ocasión de mi vida; en todos los proyectos las he tenido”
La exigencia mínima es esforzarse al máximo para estar entre los mejores. Si lo haces, una medalla o estar entre los cuatro primeros puede ser suficiente. Ahora hay que aprovechar la inercia de campeón que tiene el equipo. ¿Cómo le gustaría que se identificase a su selección? Espero que siga jugando como hasta ahora, con una gran defensa que posibilita rápidos contraataques y siempre con una intensidad al alcance de muy pocas selecciones en el mundo.
¿Así tendrá continuidad el estilo Valero: un equipo construido desde la defensa? Por supuesto que sí. Intentaré aprovechar al máximo lo que han hecho los anteriores entrenadores y lo más reciente es el trabajo de Valero. Mantener todo lo bueno nos tiene que ayudar; es una ventaja saber que el equipo confía en una forma de jugar.
¿Qué aspecto es mejorable? Tal vez, hacer un ataque posicional de alto nivel; ahora que tenemos a un central como Raúl Entrerríos intentaremos combinarlo con los otros dos, Sarmiento y Cañellas, para que hagan más juego hacia los extremos y los pivotes, y tener más opciones de juego continuado en el posicional.
¿Cuáles deberían ser los rivales para las medallas? Hasta que no llegas al campeonato no lo sabes. A priori, uno de los favoritos es Dinamarca: juega en casa y ha crecido en los últimos campeonatos. Y luego están los equipos fuertes de siempre: Croacia y Francia. Pero seguro que el 90% de equipos tendrá opciones de estar entre los semifinalistas.
¿Cómo se ve el balonmano español desde Polonia? Es un momento de cambio. Por motivos económicos se han ido muchos jugadores de calidad y no han venido otros, pero muchos jóvenes ahora tienen más posibilidad de jugar y de crecer. Desde fuera, se echan en falta medidas colectivas que ayuden a superar esta situación. No puede ser que cada equipo tenga que buscarse la vida por su cuenta.
¿Ha servido el oro mundial? Todo el mundo está más expectante con el equipo campeón; al ser en España hubo más repercusión que si lo hubiésemos logrado fuera. Creo que siempre ayuda a mantener la ilusión y las esperanzas del balonmano español.
¿Cree que ser seleccionador de España es su gran ocasión de proyectarse mundialmente? He estado en más de un proyecto y tendré más ocasiones. No creo que sea la ocasión de mi vida; en el balonmano siempre vi oportunidades en los proyectos que inicié, aunque algunos tuviesen poca repercusión mediática.