Cosas de familia

Sin duda alguna, cualquier familia puede ser un nido de perversiones. Si a la sentencia de Simone de Beauvoir se le eliminan los elementos biológicos y se suman intereses ideológicos y estrategias geopolíticas, la perversión está más que garantizada. A la familia política no se la repudia en Navidad por las diferencias sobre el futuro de Catalunya, ni se comparte banco en las comuniones. En las familias políticas la lucha por el poder lo inunda todo.

Si un primo luxemburgués aspirante a presidir la Comisión Europea aterriza en Madrid en plena campaña electoral, y lo hace de la mano del presidente del Gobierno español y del Partido Popular, sólo se puede esperar que comparta “al cien por cien” –no al 99%– sus postulados en torno a uno de los principales problemas que su anfitrión tiene sobre la mesa. La posibilidad de que sus declaraciones sobre la cuestión catalana incomoden a otro primo más o menos lejano como Unió Democràtica es irrelevante mientras Jean-Claude Juncker tenga atado por la derecha el apoyo de Mariano Rajoy –del presidente de un Gobierno, al fin y al cabo– a su candidatura europea. Aunque no lo necesite, ya que exhibe sin pudor la promesa de Angela Merkel de ser presidente de la Comisión si gana el Partido Popular Europeo. Una familia unida...

Con un pie en casa de los conservadores europeos y otro en la federación con una Convergència emparentada con los liberales, Josep Antoni Duran Lleida no esconde su convencimiento de que los tratados de la Unión no son precisamente favorables a la permanencia en el club europeo de una Catalunya independiente. Pero el líder de Unió también asegura que dirigentes europeos le han dicho a Rajoy que debe buscar una solución. Juncker no es uno de ellos.

Convergència espera mañana a su candidato a la Comisión, el flamenco Guy Verhofstadt , garantizando de antemano el apoyo de su familia liberal a la consulta y la unidad de voto en Europa de su alianza con Unió en lo referente a la consulta. Hasta hay candidatos a la Comisión que van más allá de su partido de referencia en Catalunya. La ecologista Ska Keller da por hecho que una Catalunya independiente seguiría en la Unión mientras ICV se limita a defender la consulta. Cosas de familia...

Dirigentes europeos han dicho a Rajoy que busque una salida para Catalunya; Juncker no es uno de ellos