Ligas en primera fila
El Barça ha conquistado once veces el campeonato ante la afición azulgrana
Veintidós ligas lucen en el Museu Núñez y la mitad las ha conquistado el Barça jugando en casa, con su afición instalada en primera fila para vivir en directo uno de los mejores momentos que puede proporcionar el fútbol: el de la obtención del título de la regularidad.
La Liga es una competición de fondo, no apta para velocistas. Hay que superar todas las dificultades, mantener un ritmo alto constante, resistir la competencia de los adversarios, superar las rachas de mala fortuna, mantener el equilibrio a pesar de las lesiones, sobrellevar la acumulación de partidos en diversas competiciones, aceptar con buena cara el derecho de pernada de las selecciones incluso para encuentros amistosos... y finalmente, al salir de la última curva, aparecer bien colocado para lanzar el último sprint con decisión. Cuando todo el torneo llega al sprint final y el escenario elegido es el campo propio, tanto mejor. Celebrar una Liga arropado por tu afición es una experiencia especial que el Barça ha vivido once veces a lo largo de su historia: cinco en Les Corts y seis en el Camp Nou. Este sábado tiene a punto la pelota de partido para rematar un duodécimo alirón en casa.
Uno de los títulos de Liga más difíciles, entre los once conquista- dos en campo propio, fue el del 13 de mayo de 1945, en un BarçaAthletic que acabó 5-2 y aseguró la Liga para el equipo de Josep Samitier en la penúltima jornada. Atrás quedaba un codo a codo final con el Real Madrid. Marcaron Escolà (2), César, Bravo y Gonzalvo III por los azulgrana y Gaínza y Zarra por los rojiblancos, todos ellos personajes inolvidables de un fútbol ahora muy lejano en el tiempo.
Fue una Liga ciertamente especial porque para el Barça suponía cerrar un paréntesis de dieciséis años sin conquistar el trofeo y venía además a confirmar la plena recuperación deportiva de la entidad después de la etapa más negra de la posguerra en la que perdió el escudo oficial, el nombre original, la libertad de componer sus propias juntas directivas y, por último, llegó a a flirtear con el descenso a Segunda División. El título de 1945 en Les Corts tiene un valor único en la historia del club.
Curiosamente, en cuatro de las once ocasiones que el Barça ha rematado el campeonato en casa el invitado a la fiesta ha sido el Athletic Club. Participó en aquel éxito de 1945 pero también estaba ahí en las ligas de 1948 y 1953, siempre en Les Corts, y de nuevo en la de 1992, ya en el Camp Nou.
La historia consagra a Johan Cruyff como el especialista de la victoria en el último suspiro y en casa. El técnico holandés protagonizó las ligas consecutivas de 1992 a 1994 en el Camp Nou. En los dos primeros casos en coinci-
1 9 4 4 - 1 9 4 5 El título de 1945 fue el primero que se celebró en directo en el campo de Les Corts 2 0 0 9 - 2 0 1 0 La Liga del 2010, tras batir al Valladolid, es la última rematada jugando en el Camp Nou
dencia con históricas derrotas del Real Madrid en Tenerife (3-2 y 2-0) y en el tercero con el empate sin goles del Deportivo en Riazor, contra el Valencia, con el no menos famoso y recordado penalti desperdiciado por Djukic en el último minuto de juego. Nunca una sola jugada ha sido tan claramente determinante para la pérdida de un título de Liga.
Cruyff ganó tres veces la Liga jugando en casa y encima en la última jornada, para darle más emoción al asunto. Otros dos téc- nicos disfrutaron del éxito ante la afición azulgrana en dos oportunidades cada uno: el uruguayo Enrique Fernández en las ligas de 1948 y 1949 y el eslovaco Ferdinand Daucik en 1952 y 1953.
Helenio Herrera en 1960, Louis van Gaal en 1998 y Pep Guardiola en 2010 completan la relación de entrenadores que lo han logrado. El del técnico de Santpedor es ahora mismo el referente más cercano: 16 de mayo de 2010, última jornada, visita del Valladolid al Camp Nou. El Barça se impuso por 4-0 (Pedro, Messi 2 y Luis Prieto en propia puerta) y borró todo el interés de la visita del Madrid de Pellegrini a La Rosaleda, donde además no fue capaz de vencer. El Camp Nou espera ahora la repetición de la fiesta.