El nuevo IRPF será menos progresivo al bajar a cinco tramos
Montoro anuncia que suprimirá dos de los siete niveles actuales
El Gobierno reducirá la progresividad del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), salvo que lo compense con potentes exenciones. El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, anunció ayer que se disminuirán de siete a cinco los actuales tramos del IRPF. Se limitó a decir que “bajará para todos los contribuyentes”, beneficiando especialmente a las familias numerosas y a aquellas que tengan miembros con discapacidad. Igualmente, avanzó una bajada del tipo nominal de gravamen del Impuesto de Sociedades para las empresas.
En su línea de enviar mensajes políticos y sin concreción, Montoro no preciso si se trata de eliminar los dos tramos que el PP creó en 2012 para las rentas altas o eliminar el gravamen complementario para todos los tramos, que se tradujo en subidas generalizadas para todos los asalariados.
Para Esteban Raventós, socio responsable fiscal Baker & McKenzie Abogados, “a más tramos, más progresividad y viceversa”; pero a su juicio, no es tan importante los tramos que existan, sino cómo “quedan los tipos”. Ahora, los tipos marginales van del 24,75% al máximo del 52% (ver gráfico), aunque en algunas comunidades, como Catalunya, el tipo marginal máximo llega al 56% por el tramo autonómico. De ahí se deduce, explica Raventós, “que habrá menos progresividad, salvo que se corrija con exenciones y mínimos personales”.
En la misma línea se manifiesta Rubén Gimeno, director del servicio de estudios del Reaf, que considera que “el Gobierno tiene que concretar más cómo serán los cambios del IRPF”, un tema que afecta a todos los trabajadores. Es decir, “si atañe a las rentas altas, bajas o a todos y cómo”.
El Gobierno de Rajoy aprobó un recargo progresivo del 0,75% al 7% para las renta de trabajo para 2012 y 2013, que después prorrogó este 2014. El impacto normativo perseguía inicialmente recaudar 6.275 millones, de los cuales 4.111 millones procederían de las rentas de trabajo y 1.246 millones de las modificaciones en la tributación de las rentas del aho- rro. Pero, la crisis económica, la contención en los sueldos y las altas cifras de paro llevan a que la recaudación real esté por debajo de las previsiones.
Según los datos de la Agencia Tributaria, la recaudación por IRPF en 2011 (antes de la subida del PP) fue 69.803 millones. Después, en 2012 subió a 70.619 mi-
La recaudación del impuesto cayó un 0,9% del 2012 al 2013, pese a las alzar impositivas a los asalariados
llones y en 2013 ha vuelta a caer a 69.951 millones. Resultado: hasta ahora, con la reforma en 2012 y 2013 se ha recaudado 964 millones más. De hecho, del 2012 al 2013 ha caído un 0,9%. En estos meses, los contribuyentes están haciendo la declaración de la renta del 2013. En este sentido, “normalmente, Hacienda devuelve por las altas retenciones, con lo que la recaudación aún puede caer más”, apunta Raventós.
Respecto a los cambios en Sociedades, “si la rebaja del tipo general es del 30% al 25% serviría para atraer inversiones extranjeras y se eliminaría la problemática en las sociedades de reducida dimensión para las que el tipo del 30% es un desincentivo al crecimiento”, explica Santiago Doce, socio de Deloitte Abogados.
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