China advierte a Vietnam que “no cederá ni un centímetro de terreno”
Las fábricas intentan volver a la normalidad tras los disturbios antichinos
Pelea de gallos. El estallido de violencia antichina de los últimos días en Vietnam dio paso ayer a un fuego cruzado de declaraciones entre las autoridades de los dos regímenes comunistas. Unas afirmaciones que aventuran que la tensión entre China y Vietnam parece lejos de reducirse. Una crisis provocada por la instalación de una plataforma petrolera de la empresa estatal china CNOOC en las islas Paracelso, cuya soberanía se disputan ambos países.
China advirtió ayer a Vietnam que proseguirá con sus prospecciones petrolíferas a pesar de las violentas protestas antichinas de los últimos días, que han causado entre 2 y 21 muertos y más de un centenar de heridos en el sur y centro de este país del sudeste asiático. Pekín “no puede permitirse perder un solo centímetro de su territorio”, afirmó el jefe del Estado Mayor del Ejército de Liberación Popular, el general Fang Fenghui, desde Washington, donde se halla de visita oficial. Y añadió que “la plataforma seguirá funcionando”. Las autoridades de EE.UU. le transmitieron su preocupación por la situación.
Una declaración de firmeza que iba en la misma línea que apuntaba el rotativo Global Times, perteneciente al grupo del Diario del Pueblo, órgano oficial del Partido Comunista. Si bien esta publicación, de marcado tono nacionalista, daba un paso más y planteaba que Pekín no debe descartar el recurso a la fuerza para defender la soberanía territorial china y poner fin a lo que calificaba de “provocaciones de Vietnam”. Afirmaba en su editorial que “si China no muestra su potencia, su deter- minación en defender la integridad territorial será al final subestimada”.
Pero si las autoridades chinas se mostraban ayer inamovibles, los dirigentes vietnamitas animaban a la población a demostrar su patriotismo a dos días de las manifestaciones antichinas convocadas para mañana domingo. Unas convocatorias que no se descarta que culminen en otro estallido de violencia.
El primer ministro, Nguyen Tan Dung, envió un mensaje por móvil a millones de vietnamitas pidiéndoles que, sin hacer uso de la violencia, defiendan la soberanía nacional. “El primer ministro pide al pueblo vietnamita que mantenga el patriotismo y proteja la sagrada soberanía del país con acciones realistas y legales”, señala el SMS.
El llamamiento fue reiterado por el presidente del país, Truong Tan Sang, que emplazó a la población a exigir la retirada de la plataforma china y a “luchar para proteger la soberanía nacional por medios pacíficos”.
Esta insistencia en no hacer uso de la violencia no evitó que numerosas empresas optaran ayer por cerrar sus puertas hasta el lunes. Quieren evitar verse envueltas en una nueva ola de violencia antichina. Es el caso del gigante taiwanés Foxconn, principal proveedor de Apple, que ayer anunció que paraba la producción durante tres días para garantizar la seguridad de sus trabajadores y de las instalaciones. Una medida que también adoptaron, entre otras, las firmas Nike y Adidas.
Muchas otras empresas, que en los últimos días también se vieron afectadas por los disturbios antichinos, optaron ayer por reabrir sus puertas con el objetivo de recobrar la normalidad. Las autoridades vietnamitas contribuyeron a ello con un amplio despliegue policial.
Los ministros de Comercio de los dos países tienen previsto reunirse este fin de semana para discutir sobre los disturbios de esta semana e intentar buscar soluciones para evitar que se repitan.