Las playas esperan más bañistas
El número de usuarios se dispara
El año pasado, cuando se cerró la temporada de baño de las playas metropolitanas con una cifra estimada de nueve millones de usuarios, se consideró todo un hito. Pero esta temporada, el Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) espera llegar por primera vez a la cifra de los diez millones de bañistas. ¿La causa? La crisis persiste, y a las playas metropolitanas se puede ir en metro o en Rodalies. Por otro lado, el turismo, especialmente el ruso y de la Europa del Este, prefiere alojarse cerca del mar, conocer Barcelona y a Gaudí, pero sin renunciar al sol y tampoco a la playa.
“Tenemos un litoral de mucha calidad y para que así sea reforzaremos un año más la limpieza ante este uso más intensivo”, mani- festó ayer el gerente del AMB, Ramon Torra. Lo hizo en un acto, en Viladecans, con el que se inició oficialmente la temporada de baño en las 39 playas metropolitanas, que suman más de dos millones de metros cuadrados de arena. Esta, como el agua, se analiza constantemente: El 72% es óptima y el resto es buena (si no es de más calidad es por las cacas de los perros, aunque en verano tengan el paseo vetado). Por lo que respecta al agua, el sistema de depuradoras hace que, este año también, su calidad se encuentre muy por encima de los mínimos exigidos por la Unión Europea.
En cuestión de mobiliario esta temporada se estrenan ocho campos de korfball y un nuevo sistema de megafonía, instalado en fase de pruebas en la playa de Viladecans y pensado para dar mensa- jes referentes a la seguridad y emergencias. El sistema, que se aplicará en el resto de las playas metropolitanas, permitirá la instalación de sensores y sistemas inteligentes, como aparatos de medición meteorológica, cámaras de infrarrojos o puntos repetidores de red wi-fi.
El AMB también presentó la aplicación para teléfonos móviles inteligentes Infoplatges, con información al instante del estado de las playas, y anunció que se multiplicarán por diez los aparcamientos para bicicletas.