“No todo el mundo está hecho para emprender”
Shuttle Ideas nació con el objetivo de lanzar ideas al mercado, partiendo desde su concepción, y ayudar a crear y gestionar empresas hasta alcanzar el objetivo final, que es obtener beneficios.
-¿Qué le empujó a fundar Shuttle Ideas?
Bueno, como a la mayoría de emprendedores, no sólo fue una única circunstancia la que me empujó a crear Shuttle Ideas, sino un cúmulo de ellas. Siempre he tenido un “cajón de ideas” que en mayor o menor medida se podrían comercializar. Participé en varios concursos, pero una vez ganado, los proyectos moría generalmente por falta de apoyos. Un día cuando aún trabajaba para una multinacional llamé a un centro público en los que te asesoran para montar una empresa. “Tiene que venir a una sesión informativa que hacemos los jueves a las 10.30 h”, me contestaron. “En ese horario estoy trabajando ¿no tienen otro horario?”, respondí. “¡No! Y además los talleres que deberá realizar también son en horario de mañana”. Meses más tarde ante la previsión de financiación para un proyecto, me interesé por asistir a un foro de inversores. Que gran sorpresa, cuando me explicaron que para poder explicar mi proyecto a posibles inversores, debía desembolsar 2.300 € en concepto de asistencia. Esto ya fue la gota que colmó el vaso, y como en una ocasión había leído que si tras dar tres buenas ideas en tu empresa no te hacen caso, es mejor que te marches, opté por la creación de Shuttle Ideas.
-¿Qué servicios ofrecen en Shuttle Ideas?
En Shuttle Ideas tenemos dos líneas de negocio. Una es la investigaciónypuestaenmarcha de proyectos propios y otra es la ayuda a otras personas para que pongan en marcha sus propios proyectos. Hace un año que pusimos en marcha la empresa Shuttle Baby, que se dedica a la venta de productos infantiles de alimentación e higiene, y en estos momentos estamos ultimando con distintos ayuntamientos una prueba piloto de un dispositivo de vigilancia de infracciones de tráfico. Desarrollamos un proyecto con las guarderías de Sant Just Desvern, gracias a la colaboración del Ayuntamiento, para la recogida selectiva de pañales para su posterior reciclaje. También tenemos avanzado otro proyecto sobre hidroponía… Para todas las personas que quieran venir a vernos, lo que ofrecemos varía según sus necesidades, desde un espacio donde poder desarrollar su proyecto con nuestra colaboración, a la creación de la empresa ubicándose en nuestras oficinas con el acompañamiento hasta su despegue, la gestión administrativa…
-¿Qué tipo de empresas acuden a ustedes?
Suelen ser personas que quieren montar su propio negocio, o que ya lo tienen en marcha pero no acaba de funcionar. Son tres tipos de clientes. El primer tipo es muy buen profesional en una materia, pero no sabe crear ni gestionar una empresa. El segundo es el emprendedor per se, que siempre tiene un montón de ideas para llevar a cabo, pero que detesta gestionar un negocio. Y el tercero sería el de vocación de empresario porque le gusta gestionar y hacer crecer negocios, pero que no tiene por qué tener buenas ideas, ni saber de ninguna profesión concreta. Lo primero es escuchar y comprender cada situación y ser íntegro y honesto, para decir la verdad sobre su proyecto. Es detestable dar alas a una mala idea que fracasará por sólo cobrar unos honorarios. Lo de “fracasar es positivo”, es una estupidez.
-¿En época de crisis, hay más emprendedores que quieren desarrollar sus ideas empresariales?
El emprendimiento está de moda, pero a veces tengo la sensación que son más los que viven a costa de él, que realmente los resultados que se obtienen con nuevas empresas de calidad que aportan valor y creen riqueza para el resto de la sociedad. No todo el mundo está hecho para emprender, ni todo el que se decide y se tira a la piscina mira primero si está llena de agua para no darse de bruces.
-Si tuviese una idea, ¿qué consejo me daría para que acabara siendo un buen negocio?
Una misma idea desarrollada por diez personas distintas dará como resultado diez modelos de negocio distintos. Prefiero una idea normalita desarrollada adecuadamente, que una fantástica idea puesta en marcha de forma mediocre. Huye de los consejos de librillo. Habla primero con todos los empresarios que puedas dentro y fuera de tu sector. Pídeles una pequeña reunión para que te expliquen su experiencia y te aclaren tus ideas. Te sorprenderás de cuanta gente generosa sentirá empatía y te atenderán desinteresadamente.