Deja la política para cuidar a su esposa
El alcalde de Mataró renuncia a ser reelegido
El alcalde de Mataró, Joan Mora, anunció ayer en una improvisada rueda de prensa que no concurrirá como alcaldable de CiU a las próximas elecciones municipales del 2015. Mora, que ha pasado un duro trance familiar con la enfermedad de su mujer, no ha duda- do en qué decisión tomar: “Mi familia me necesita más”.
Empresario informático, Joan Mora i Bosch, nacido en Arenys de Mar en 1963, empezó a militar en política en 1990 con CiU. Ha sido el único líder convergente que acabó con la hegemonía socialista en la capital del Maresme, donde en las últimas elecciones municipales superó en votos al PSC de Joan Antoni Baron y consiguió hacerse con la alcaldía gobernando en minoría.
Con una carrera política fulgurante –era uno de los nombres que sonaban para ocupar alguna conselleria en el Govern– Mora se ha caracterizado por mantener una política de proximidad con la ciudadanía, tanto que, co- mo él mismo ha reconocido, le ha valido un sobreesfuerzo que ha ocupado la mayor parte de su tiempo, en detrimento de la familia, en especial de su mujer, Pilar, que acaba de superar una grave enfermedad.
“Ha sido una decisión muy meditada” avanzó ayer, rodeado de todos los miembros del gobierno municipal. Mora explicó que previamente había notificado su postura al presidente de la Generalitat, Artur Mas, y a la asamblea de militantes, a quienes pidió que entendieran que “mi familia me necesita” y que, en cambio, el proyecto político puede seguir sin él. En este sentido, Joan Mora incidió en el futuro del grupo municipal que preside, dejando un mensaje a su sucesor para que “considere la experiencia del grupo municipal” formado en su mayoría por concejales que nunca antes habían estado en primera línea política.
Aun quedándose al margen de la vida política, Joan Mora, cuyo compromiso de seguir en el Ayuntamiento durante dos legislaturas se ha desvanecido, mantendrá la firme voluntad de colaborar “en los proyectos clave”, como la consulta por la independencia del 9 de noviembre. La decisión que ha tomado, asegura que no debe afectar a la gobernabilidad de Mataró ya que “la política es un juego de equipo y de relevos, donde nadie es indispensable”. No obstante, Mora deja una puerta abierta y aseguró que su marcha “no tiene por qué ser un adiós definitivo”.