Reforma serena frente a revolución
Sánchez se propone en su estrategia electoral combatir el discurso de Rajoy de “o nosotros o el caos”
Es perfectamente verosímil que tras las próximas elecciones generales el PSOE pueda formar gobierno. Si tal cosa sucediera, los españoles ven a los socialistas y a Pedro Sánchez como la fuerza política más capacitada para establecer acuerdos”. Así lo afirma el primer borrador de estrategia electoral del PSOE para los comicios del 2015, al que ha tenido acceso La Vanguardia.
Tsunami político. “Una enorme ola de indignación con la corrupción y el clientelismo”, asola España, dice el documento. “Un auténtico tsunami político”. Pero “el depositario principal de la indignación es el PP”, advierte. Y pese a dicha ola, existe un “rechazo mayoritario a posiciones maximalistas” fundado en que “es necesaria la reforma pero no la revolución; se deben abordar cambios imprescindibles pero no demoler el sistema de derechos y libertades construido desde la transición”. “El enfado de la sociedad es indiscutible y pro- fundo, pero no prerrevolucionario ni demoledor. Quiere cambios pero no revolución, acuerdos y no enfrentamientos”. Y ese será el espacio de Sánchez: “Frente al inmovilismo y la demolición, la reforma serena”.
El miedo. “El PP apelará al voto del miedo”, asegura. Y su oferta será “nosotros o el caos”. Una paradoja ante “la triple y aguda crisis económica, social e institucional” tras tres años de Gobierno conservador. El PP se aferrará a la recuperación económica pero, si se produce, “será lamentablemente raquítica”. La estrategia del PSOE, no obstante, no será negar el crecimiento económico, sino resaltar que el PP ha beneficiado a las clases pudientes y asestado “tres grandes golpes a la clase media” con las reformas laboral, fiscal y de las pensiones.
Extremistas. “Desvelar la contradicción entre las palabras hoy moderadas y el discurso radical de siempre de los líderes de Podemos”, será otra estrategia electoral. “Podemos no es la reunión de gente corriente que afirman sus dirigentes, sino la canalización del descontento social por líderes que proceden de la extrema izquierda”. “Extremista”, por tanto, es un término más adecuado para tratar a la dirigencia de Podemos que “populista”, receta.
El doble gran activo. “El liderazgo de Pedro Sánchez es uno de los valores en estos momentos de la organización; su fortaleza radica en que es percibido como un cambio”, asegura el texto. “Pero los españoles no apoyan cambios radicales y una de las ideas fuerza deberá ser el cambio seguro que ga- rantiza Sánchez”. Y añade: “Es un gran activo del PSOE de hoy que su secretario general se maneje bien en las dimensiones de autenticidad, sencillez y naturalidad. Y también que sea identificado ya como alguien con formación económica, profesor universitario, doctor en Economía y capaz de hablar otros idiomas”.
Indignación en Catalunya. El borrador apenas se detiene en la situación de Catalunya. El motivo es que el PSOE está a la espera de que Artur Mas despeje la incógnita del adelanto electoral. Pero Sánchez dará a conocer sus nuevos pasos en torno al 6-D. “Resulta muy ilustrativo que los españoles hablen de la corrupción mucho más y con mucha más preocupación que del desafío de los independentistas catalanes –dice el documento–. Sucede así en toda España, con la excepción de Catalunya”. En Catalunya, añade, “la indignación también existe, por supuesto, pero acompañada, y en cierto modo amortiguada, por una corriente adicional que es la del derecho a decidir”.
Hemorragia contenida. La primera prueba de fuego serán las municipales y autonómicas de mayo, “en las que se pueden esperar datos favorables que adviertan una recuperación del PSOE”. Pero “sería ingenuo e ilusorio esperar un vuelco”. “Es imposible que el PSOE recupere todo el apoyo perdido en ocho meses”, admite. “Sin embargo, es evidente que la sangría se ha detenido y la revitalización ha comenzado”.