La universidad pone en duda que el profesor tenga que ser funcionario
Algo se mueve en la universidad. La comunidad universitaria siente la necesidad de que se realicen cambios para no perder el impulso y mejorar: cree que es preciso aumentar la competitividad, para lo que precisan una mayor autonomía, piden más evaluaciones internas y más control de los gastos, a la vez que solicitan una financiación estable pública (que no venga de las tasas) para seguir avanzando. Pero, además, creen que es preciso mejorar, y mucho, los procedimien- tos de selección del profesorado, tanto en la pública como en la privada. Y en esta línea, y con el objetivo de conseguir una universidad más eficiente, llegan a poner en duda la conveniencia de mantener el estatuto del profesorado como funcionarios.
Así lo indica el estudio La comunidad universitaria española opina, presentados ayer por la Fundación Europea Sociedad e Información y elaborados por los sociólogos Víctor PérezDíaz, presidente de Analistas Socio-Políticos (ASP) y premio Nacional de Sociología y Ciencia Política 2014, y Juan Carlos Ro- dríguez, sociólogo e investigador de ASP, tras recoger 41.122 cuestionarios válidos entre profesores, personal administrativo y de servicios y estudiantes universitarios. También se presentó otro estudio Opiniones de los españoles sobre sus universidades: algunas perspectivas, con la opinión de 1.200 ciudadanos de entre 18 y 70 años.
Víctor Pérez-Díaz indicó que a tenor de los datos obtenidos en ambos trabajos sugieren una visión moderadamente positiva de las universidades españolas y revelan que hay “un amplio margen de mejora” en aspectos co- mo la información disponible, la formación on line, la movilidad de los estudiantes, la diversificación de las fuentes de financiación o el aumento de la autonomía universitaria.
En el caso de la comunidad universitaria cree que las universidades están cumpliendo el fin prioritario, que es formar a buenos profesionales. Los estudiantes valoran positivamente el conocimiento de sus profesores, aunque creen que fallan en su capacidad pedagógica y su vocación por la enseñanza. Lo peor para los estudiantes es, sin embargo, lo poco innovador de sus métodos de enseñanza.
Siguiendo con el profesorado, los datos del Ministerio de Educación revelan que el 73% de los docentes del curso 2013-2014 estudió en el centro en el que está contratado, algo que a juicio de los sociólogos autores de los citados informes, se debería reducir. Y proponen cambios legislativos al respecto si fuera necesario.
En Estados Unidos, suelen contratar profesores de fuera y esperar que sus titulados se marchen al extranjero a buscar trabajo, explicó Juan Carlos Rodríguez, quien explicó que “no hay ninguna regulación”, sino que es “una costumbre”. En Alemania o Reino Unido, sin embargo, hay una regulación que dificulta la contratación de los profesores autòctonos e incita a los titulados de esos países a marcharse fuera.
El sociólogo ha reconocido que en algunas zonas de España, como Catalunya, se ha intentado traer profesores de fuera y se ha conseguido hasta cierto punto sin la necesidad de impulsar cambios legales.