Inferiores de verdad
La caída libre del Barça B simboliza el bache de la cantera blaugrana
Ni el filial ni el Juvenil A ni el Juvenil B ni el infantil A. De los cinco mejores equipos de la cantera del Barcelona, sólo el cadete A, entrenado por Quique Álvarez, ganó en la última jornada. Fue un fin de semana negro para la Masia en cuanto a resultados. El escandaloso 7-0 encajado por el Barça B en Valladolid, a manos de Rubi –extécnico de la casa–, fue la constatación de que el fútbol formativo blaugrana no pasa por su mejor momento, inferior al Espanyol, que es líder en los dos juveniles y en cadetes. Una cri- sis que llega en mal momento ya que el club debe tirar de sus promesas al estar sancionado sin fichar hasta el 2016, a la espera del TAS.
Especialmente difícil es la situación del B, que tras la goleada encajada en Zorrilla se encuentra sólo un punto por encima de la zona de descenso. El filial sólo ha ganado un partido de los últimos diez y ha entrado en caída libre en la cuarta temporada de Eusebio Sacristán en el banquillo del Mini Estadi. El gran objetivo del filial siempre ha sido más formar jugadores para el primer equipo que conseguir una buena posición. Pero, pese a poder contar con futbolistas que ya han debutado en el Camp Nou como Patric, Edgar Ié, Samper, Dongou, Sandro y Adama más el fichaje de Alen Halilovic, que con 18 años es internacional absoluto con Croacia y que había jugado más de 40 partidos con el Dinamo de Zagreb, el B no logra salir del pozo.
Esta campaña está siendo la peor del técnico de La Seca, que el curso pasado fue capaz de meter al filial tercero en la clasificación final. Antes fue octavo en su primer año y noveno en el segundo. Sin embargo Eusebio, de 50 años, no achaca el bache a síntomas de cansancio. “Soy la persona adecuada para dar la vuelta a la situación. Tenemos la experiencia de llevar a un equipo tan joven y tenemos detectado lo que tenemos que hacer”, recalcó Eusebio tras el varapalo.
A nadie le extraña ya que el Barça B exhiba lagunas defensivas, pues se trata de un equipo tierno, con una media de 19,3 años, que además quiere jugar un fútbol ofensivo. De hecho, en estas últimas tres temporadas y media lleva recibidos la friolera de 203 goles. Pero es que este curso únicamente el colista de la Liga Adelante, el Albacete, ha recogido más veces la pelota de su portería que el guardameta Ortolá (32 veces).
El cuerpo técnico considera que no es un problema de falta de autoridad ni que se necesite mano dura. Sino que cada verano debe volver a empezar porque la base del equipo vuela del nido en busca de otros objetivos. Este año ha perdido a Masip (primer equipo), Planas y Sergi Gómez (Celta), Espinosa (Villarreal), Denis Suárez (Sevilla), Ilie y Edu Bedia (Munich 1860) y Nieto (Eibar).
Para suplirlos, se fichó a Gumbau, Bicho, Cámara, al senegalés Diagne y, sobre todo, a Halilovic. De un tiempo a esta parte, el filial parece empecinado en encontrar a la nueva estrella en otros lares y pagando. Se intentó con el argentino Araujo (ex de Boca), con Luis Alberto (con pasado en el Sevilla). con Denis (fichado del City), Halilovic o ahora Martin Odegaard, la perla noruega de 16 años, que ha visitado las instalaciones recientemente. Pero cuando se apuesta todo al gordo se corre el riesgo de descuidar la pedrea.