125 años de ‘football’
UN MOMENTO DELICADO Ni la recepción del papa Francisco ha servido para enderezar el rumbo del Recre en Segunda Ingleses de la Rio Tinto Company introdujeron el fútbol en España con la creación el 23 de diciembre de 1889 del Huelva Recreation Club EL ORIGEN La historia del club está muy ligada a los ingenieros, médicos y administrativos británicos que se instalaron en la comarca
El 23 de diciembre de 1889 un acontecimiento en Huelva mereció la atención de la prensa de la época, aunque pasó inadvertido en el resto de España. En la sala de las chimeneas del hotel Colón se firmaba el acta de fundación del Huelva Recreation Club, una sociedad destinada a la práctica del football, el cricket y el tenis, cuya primera junta provisional se había celebrado unos días antes. Hace ahora 125 años nacía el primer club de fútbol en España.
La conmemoración de la fundación del club decano en España coincide con uno de esos momentos críticos que tantas veces ha vivido el modesto club onubense a lo largo de su historia. Con problemas en Segunda A, ni la recepción ofrecida por el papa Francisco con motivo del aniversario ha servido para enderezar el rumbo de un equipo que lucha, una vez más, por mantener la categoría.
La historia del Huelva Recreation y, por tanto, del fútbol en España está ligada a los ingenieros, médicos y administrativos británicos que se instalaron en la provincia desde que en 1873 un consorcio británico comprara las minas de Río Tinto al Estado español por 92 millones de pesetas y creara la Rio Tinto Company Limited. Los británicos que se instalaron en Huelva importaron sus costumbres y sus aficiones. Entre ellas, el gusto por las reuniones sociales al aire libre donde la práctica de diversos deportes marcaba el centro de la fiesta. En 1878 fue un médico, el doctor William Alexander Mackay, el que impulsó la actividad deportiva entre sus compatriotas como un método para mantenerse activos y relacionados en esa zona subdesarrollada del mundo a la que se habían tenido que trasladar. El deporte y los baños de sol y mar en las cercanas e idílicas playas de Huelva se convirtieron en las actividades preferidas de aquellos pioneros.
Su primitivo Club Inglés de Rio Tinto se extendió después a la capital, donde Mac- kay creó la Sociedad de Juego de Pelota, que sería el precedente directo del Huelva Recreation Club. Aquellos caballeros ingleses que organizaban partidos contra los marineros de los buques mercantes que atracaban en el puerto de Huelva para llevarse el mineral a Inglaterra llamaron la atención de la población autóctona. Un año antes del nacimiento del Recreativo se produjo un acontecimiento histórico muy poco conoci- do por el resto de los españoles. El 4 de febrero de 1888 miles de personas venidas de toda la comarca se manifestaron contra la Rio Tinto Company Limited, que no hacía nada para evitar que las emanaciones sulfurosas procedentes de la extracción del mineral llegaran a la atmósfera, convirtiendo el aire en irrespirable. Fue la primera gran manifestación de carácter medioambiental, saldada con más de 100 muertos cuando las fuerzas del regimiento Pavía, desplazadas desde Málaga, abrieron fuego.
La empresa británica hizo todo lo posible para que la matanza no trascendiera. Algo que logró pero que también espoleó la conciencia de algunos de sus empleados, entre ellos el doctor Mackay, un hombre de personalidad arrolladora, que entendió como un deber reparar lo sucedido en la medida de sus posibilidades. Poco después de los hechos, el médico invitaba a un joven onubense de 15 años, Ildefonso Martínez Pérez, a jugar un partido de football contra los marineros del mercante Jane Cory. Era el único futbolista no inglés de los 22 que participaron en el duelo. El primer español que podía demostrar documentalmente que fue futbolista, aunque después colgó las botas para dedicarse al remo.
El primer desplazamiento del que se tiene noticia se produciría dos meses después, cuando el Huelva Recreation Club recibió una invitación para disputar un partido frente al Club Inglés de Sevilla, compuesto por los responsables de la empresa minera que tenían establecido su domicilio en Sevilla. El Recreation llevó a Sevilla a 6 jugadores onubenses y 19 británicos que disputaron el que es considerado por la Federación Española el primer partido jugado en suelo español. El Huelva Recreation ganó 2-0.