La Penya peleona
Un parcial de 0-12 no impide la sexta victoria seguida de la Penya
El Fiatc Joventut fue capaz ante el Iberostar Tenerife de superar impedimentos como la inferioridad en el rebote, un paupérrimo porcentaje de tiros libres y un parcial de 0-12 que dio la vuelta al marcador cuando parecía tener el partido encarrilado.
Sexta victoria consecutiva de un FIATC Joventut que lucha por ser cabeza de serie en la Copa del Rey y ayer demostró que es muy capaz de superar todos los impedimentos. En este caso tuvieron tres problemas graves, que son muchos: la inferioridad en el rebote (33 por 46, con 22 ofensivos de los tinerfeños), un paupérrimo 13/27 de tiros libres (acierto casi idéntico al de los triples, 11/24) y un parcial de 0-12 que dio la vuelta al marcador (del 74-64 al 74-76) justo cuando, a 9 minutos del final, parecía tener el encuentro más encarrilado.
Los verdinegros, más seguros de sí mismos cada vez que ganan un partido igualado (y ya son muchos), ya pasaron un mal momento en el primer cuarto, plasmado en un parcial de 0-9 (del 5-2 al 5-11), pero se recuperaron gracias a los triples: dos de Suton para empatar y uno de Suárez para recuperar el mando (28-25, minu-
Los verdinegros fueron muy inferiores en el rebote y fallaron 14 de sus 27 tiros libres
to 9) en una fase de claro dominio de los ataques sobre las defensas. El menorquín, cuya aportación está creciendo enormemente, estuvo ayer infalible desde los 6,75 m: 4/4. El primer cuarto acabó con un espectacular 30-27.
En el segundo, con menos acierto en el tiro, sobre todo por parte de los locales, el Iberostar tuvo hasta 6 puntos de ventaja (44-50), que un triple de Kirksay redujo a la mínima expresión en el descanso (49-50). Otro del alero franco-estadounidense puso de nuevo por delante a su equipo (53-50), que después de unos minutos de alternativas, sin que el juego tuviera un dominador claro, cobró una ventaja de 8 puntos (68-60, 28m) con el cuarto y último triple de Suárez.
El último cuarto comenzó con un triple fallado por Vidal, pero Abalde capturó el rebote ofensivo y el mismo Vidal anotó para poner el 74-64. Fue la mayor ventaja de los badaloneses, que cuando parecía que podían controlar mejor la situación cayeron en una pájara que pudo costarles cara. Fueron sus peores momentos, tanto en ataque, fallando incluso Vidal tres tiros libres consecutivos, como en defensa, y los tinerfeños lo aprovecharon para remontar con inesperada rapidez.
El 74-76 prometía otro final a cara o cruz... si los verdinegros lograban recuperarse. Y una vez más lo hicieron, con una canasta de Hannah para empatar, otra de Savané (espléndido una vez más, con 5 tapones) con tiro libre adicional para recuperar la delantera (80-78), un triple de Hannah para llegar al 83-78 y a partir de ahí jugarse la vida en cada defensa, cada rebote, hasta respirar (88-83) con dos tiros libres de Mallet a falta de 16s.