El Museu d’Història de Catalunya se redefine
El Museu d’Història de Catalunya (MHC) afronta una nueva etapa marcada por tres factores: cambios en la estructura (pasó a depender de la Agencia Catalana del Patrimonio y forma parte de la Xarxa de Museus d’Història i Monuments), el cambio de director y un espacio saturado, con la finalización del contrato de alquiler a finales del 2019. Jusèp Boya, director escogido en concurso para un mandato de cinco años, quiere “un museo sobre Catalunya abierto al mundo” y “capaz de representar otras realidades históricas y favorecer un diálogo entre lo local y lo global, en el ámbito intercultural”. Boya es consciente de que “crear una nueva sede es un proyecto de 8 a 10 años, que no depende solo de los recursos”. A corto plazo se quiere dotar de un Consejo Asesor y a largo plazo contribuir a crear una colección nacional propia “con estructuras cooperativas y reservas de gestión mancomunadas”. El programa del 2015 incluye las exposiciones sobre CC.OO. (prorrogada), el fotógrafo Francesc Boix, Ramon Muntaner, Marruecos (con el Museu de la Immigració de Sant Adrià) y, la última, A bodes em convides, sobre el amor y el matrimonio.