El buen tiempo ayuda a Iglesias contra pronóstico
Hasta el viernes, los informes meteorológicos habían pronosticado lluvia, frío y viento en todo Madrid a la hora de la marcha de Podemos, a mediodía. Pero no: los organizadores y manifestantes disfrutaron de un sol radiante la mayor parte del tiempo. Sólo al final del acto, cuando habló Pablo Iglesias, un desfile de nubes enfrió el aire y amenazó lluvia. Fue falsa alarma.