El Barça ya está entre los cuatro grandes
Los blaugrana ganan con solvencia al PSG (2-0) y se meten en semifinales
Continúa el Barça en su proceso de recuperación de parte de su memoria y luce cada vez más hermoso, brilla en el juego colectivo y deslumbra en lo individual. Estuvo imponente anoche el Barça para gozo de un Camp Nou que volvió a registrar una fabulosa entrada. Está cada vez más cerca de la excelencia en todo, especial- mente durante la primera parte. Vive una primavera divina, en la que florece la calidad, resplandece la seguridad y brota de forma monumental su superioridad. C’est fantastique! Seguramente titulará así un diario francés, admirado por la espléndida lección de juego que ofreció anoche el Barça ante su mejor equipo, el Paris St.-Germain. Fue una cátedra en toda su extensión la que dictó el Barça para entrar de forma oficial, con letras grandes, entre los cuatro grandes candidatos al título de la Champions, entre los que también está el Bayern de Munich, tras su colosal remontada ante el Oporto.
Será la séptima semifinal en ocho temporadas del Barça. Como él, ningún otro en Europa. La mayor parte del camino hacia Berlín, el próximo 6 de junio, está hecho. Ya sólo quedan dos partidos. Hoy se conocerán los otros dos semifinalistas: Madrid o Atlético y Juventus o Mónaco.
No jugó a nada el PSG. Estuvo en el campo y vistió de blanco. Y en su once estaban Ibrahimovic y Verratti, pero los dos no consi- guieron mejorar nada. Quizás fue hasta peor el PSG de ayer que el que perdió en París (1-3). No presionó. Tampoco intimidó. Careció de iniciativa. Y se limitó más a ver el partido. En definitiva, jugó como un derrotado. Ni siquiera hizo el intento de mejorar la imagen, como le había pedido la prensa de su país.
Y lo fue más cuando Andrés Iniesta se inventó una jugada en la que recordó a Messi driblando rivales, y también se pareció al mejor Bernd Schuster en una salida fulgurante, y también a Johan
SEÑOR INIESTA En el primer gol, Andrés emuló a Messi, se pareció a Schuster y recordó a Cruyff DES LUMBRANTE Luce el Barça cada vez más hermoso, brilla en el juego colectivo y maravilla en lo individual
Cruyff en la elegancia y finura con la que saltaba sobre adversarios. El jugadón de Iniesta, que completó una extraordinaria primera parte, acabó con un pase entre líneas a Neymar, que dijo “yo no voy a estropear esto” y lo remató superando a David Luiz y regateando a Sirigu para marcar a placer. Sencillamente majestuoso, y también espectacular.
Con el 1-0, el PSG experimentó en sus carnes la evidencia de su inferioridad. Siguió cabizbajo, como el boxeador que de antemano sabía que a aquel adversario no le iba a ganar nunca, y mucho menos a remontar un resultado adverso aunque estuviera jugando tres días seguidos.
Se divirtió el Barça y entusiasmó al Camp Nou, que vivió el partido de forma festiva, gozando con el juego de equipo, con las jugadas individuales, y acabó haciendo la ola y cantando. Invita este Barça de Luis Enrique a vivir en una nube de felicidad y, especialmente a soñar. Gobernó el partido con autoridad y nunca dio muestras de debilidad, ni en defensa, ni tampoco en ataque, ni colectivamente y mucho menos individualmente.
Cuando encontró el 2-0, gracias a un centro con la izquierda de Alves, tras marcarse un pase de samba ante su compatriota Maxwell, y un cabezazo espléndido de Neymar que se encontró libre de marca para batir por segunda vez a Sirigu.
Ese fue el golpe definitivo que recibió el PSG para irse a la lona. Apenas se estaba jugando el mi- nuto 34 y quedaba todo un martirio para el equipo de Laurent Blanc. Pero el Barça utilizó la cabeza. No se volvió loco, sabe que el sábado tiene otro partido importante en la Liga, en la que no puede darse el lujo de perder un punto, y siguió dominando, y disfrutando con el juego, pero lo hacía ya de forma conservadora, pensando en el derbi, guardando fuerzas porque lo que queda no es fácil y sí, en cambio, resulta más que atractivo.
Vive el Barça un momento de inspiración en todos los sentidos. No miente Luis Enrique cuando en la previa dice que da garantías de que su equipo va a estar al nivel deseado. El nivel es altísimo. Sufrirá, como lo hizo ante el Valencia, y le puede pasar el sábado en Cornellà, pero hay predisposición, ganas y convencimiento de que hoy en día es difícil que haya un equipo que le pueda vencer.
La garantía, desde luego, la ofrece la seguridad que brinda cualquiera de los porteros que juegue, la seriedad y eficacia de Piqué y Mascherano, y el buen momento de Alves y Alba. También ofrece garantías un mediocampo en el que Rakitic se sale, Busquets está inmenso, Iniesta está cada día mejor, y Xavi hace exactamente lo que necesita el equipo. Y delante, ya no se diga. Cuando no marca Messi, lo hace Luis Suárez, todo terreno, incansable, bravo, y sino lo hace Neymar. Y si Messi no marca, el argentino aparece como gran líder. Es un Barça que invita a soñar.
SIN ADVERSARIO El PSG no jugó a nada. Llegó derrotado y no mejoró ni con Verratti ni tampoco con Ibrahimovic DOBLETE DE NEYMAR El brasileño remató como merecía la extraordinaria jugada de Iniesta y marcó otro gol de cabeza