La Vanguardia

El Barça se cruza con Dujshebaev camino de la 9.ª Champions

- TONI LÓPEZ JORDÀ Barcelona

Dos años después de enfrentars­e por última vez, el Barça vuelve a encontrars­e en el camino con Talant Dujshebaev y con el Kielce, ahora con la final de la Champions en el horizonte y el reto del 9.º cetro europeo para los blaugrana. Catalanes y polacos disputarán, el 30 de mayo en Colonia, la primera semifinal (15.15h); en la otra (18h), Kiel y Vészprem repiten el duelo del 2014, que tuvo color alemán.

El Barça-Kielce es una reedición de la semifinal del 2013, que dio acceso a los blaugrana (28-23) a su última final europea. Entonces el Kielce aún no tenía a Talant, que ocupaba el banquillo del Atlético, al cual, un mes antes (abril 2013) el equipo de Xavi Pascual había eliminado en cuartos, en una épica vuelta en el Palau (32-24). Fue la última vez que se cruzaron con el técnico kirguiso-español, una de las bestias negras más recurrente­s del Barça durante sus 9 años en el banquillo del Ciudad Real/Atlético (2005-13).

El Kielce, que disputará su segunda final four, es un equipo rotundo, temible. No sólo por la histórica animadvers­ión de Talant al Barça (llegó a decir que lo “odiaba”, pese a que su hijo pequeño, Dani, juega en el juvenil). También por

UN RIVAL TEMIBLE El Kielce, el equipo más ganador (13), cuenta con media selección polaca y media croata

las dificultad­es tácticas que plantea siempre Dujshebaev –“usa diferentes sistemas defensivos, 5:1, 6:0, mixtas, que cambia durante el partido”, analizaba Pascual–, y por la completísi­ma plantilla de que dispone, “con fondo de armario”: mantiene el mismo bloque de hace dos años, con media selección polaca (el meta Szmal, el bombardero Bielecki –76 goles, 5.º máximo realizador de la Champions–, Lijewski, Rosinski...) y media croata (Cupic –51–, Buntic –49–, Strlek, Musa), además de Julen Aginagalde, uno de los mejores pivotes del mundo.

Barça y Kielce presentan similares números –presupuest­o parecido (8 millones), 12 victorias, 1 empate, 1 derrota los blaugrana; 13 triunfos, 1 sola derrota, contra el Montpellie­r, los polacos–. La incógnita es cómo llegarán de aquí a un mes a Colonia. “Los equipos cambiarán porque en 10 días hay partidos de seleccione­s; espero que nos afecten poco”, decía Pascual, que habría preferido que la final four “hubiese sido este fin de semana”. Hasta Colonia, 37 días, el Barça jugará 4 partidos de Liga.

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