Rescate de un ferry en Mallorca
El fuego en un ferry con 156 pasajeros deja en susto lo que pudo ser tragedia
Los 156 pasajeros del ferry Sorrento, que cubría la ruta Palma-Valencia, fueron evacuados al declararse un aparatoso incendio en el buque cerca de la isla de Dragonera. El fuego se originó en el garaje del barco, aunque aún se desconocen las causas. La tragedia personal pudo evitarse, pero no se descarta la ecológica, puesto que el ferry corre riesgo de hundirse.
La tragedia humana ha podido evitarse, pero las consecuencias medioambientales son, de momento y por ahora, imprevisibles. El ferry que se incendió, ayer, cerca de la costa de Mallorca y de la isla de la Dragonera seguía ardiendo después de que sus ocupantes hubieran desembarcado sanos y salvos en el puerto de Palma después de pasar, posiblemente, uno de los días más largos de su vida. Los pasajeros permanecieron siete horas en el mar.
Tapados con mantas y en silla de ruedas llegaban a tierra firma algunas de las 156 personas que viajaban en el buque Sorrento de la compañía Trasmediterránea y que tuvo que ser evacuado en alta mar a consecuencia de un incendio en el garaje de la cubierta número 4. El fuego se inició por causas que aún se desconocen, según informó, ayer, la naviera.
Los hechos ocurrieron a las 13.50 horas, a 20 millas de Palma –concretamente al oeste de Mallorca, cerca de la isla de la Dragonera– desde donde había zarpado el buque con destino a Valencia, siguiendo su ruta habitual. Las llamas se iniciaron una hora después de abandonar la capital balear sin tener que lamentar víctimas.
Sólo cuatro tripulantes tuvieron que ser rescatados en helicóptero y trasladados al hospital por encontrarse fuera de la zona de evacuación en el momento en que se produjo el incendio. Uno de ellos, un joven italiano de 25 años, presentaba un cuadro de intoxicación leve por inhalación de humo, aunque fue dado de alta a las pocas horas de ingresar al igual que un ciudadano filipino que sufrió una crisis de ansiedad. Tras desatarse el fuego, el capitán del Sorrento no consideró necesaria la evacuación del ferry en un primer momento y así lo manifestó en la llamada que realizó a Salvamento Marítimo a las 14.00 horas para informar del incendio, tal como detalló Teresa Palmer, delegada del Gobierno en Baleares. Palmer añadió, sin embargo, las unidades de rescate se pusieron en marcha inmediatamente hasta el lugar del suceso. Cuando llegaron, la evacuación ya se había iniciado con el traslado de los viajeros a los botes salvavidas y a las balsas hinchables ante la imposi- bilidad de apagar las llamas.
Dichos pasajeros, entre los que se encontraban 46 miembros de la tripulación, fueron transbordados al buque Puglia de la compañía Baleària bajo la supervisión y la coordinación de Salvamento Marítimo, que llegó hasta el lugar del siniestro con dos embarcaciones y un helicóptero. A este se sumó otro de la Guardia Civil, además de dos barcas del Instituto Armado.
Otro ferry más de Baleària, el Visemar One también acudió al auxilio. Dicha embarcación había partido de Palma en torno al mediodía, poco antes del buque incendiado, por lo que al recibir el aviso de emergencia viró 180 grados para participar en el rescate y a las 17.30 horas reanudó su travesía hacia Valencia con 232 pasajeros a bordo, según la naviera. Ba- leària detalló, en un comunicado, que sus dos buques permanecieron, “en todo momento”, en el lugar del incidente “asistiendo y colaborando” con las autoridades. El Puglia, que se desvió de su ruta Eivissa-Barcelona, retrocedió para recoger a los pasajeros y la tripulación evacuados en los botes de salvamento arriados por el Sorrento para iniciar su retorno a la capital balear, donde tomó tierra a las 20.15 horas.
En el dique del Oeste del puerto de Palma les esperaba un amplio dispositivo de la Cruz Roja para brindarles atención sociosanitaria y el servicio de emergencias 112 que les proporcionó atención psicológica. La Guardia Civil procedió a la identificación de todos los pasajeros y se hicieron entrevistas con cada uno de los ocupantes de la embarcación tras fa-
La ministra Ana Pastor se desplaza a Palma y dice que la prioridad es minimizar el riesgo medioambiental
cilitarles protección y evitar que los medios de comunicación se acercaran a ellos. Un amplio abanico de autoridades también presenció el atraque del barco, en silencio. Entre ellos el presidente del Govern balear, José Ramón Bauzá. La ministra de Fomento, Ana Pastor, se desplazó anoche a Palma para conocer de primera mano la situación de los pasajeros y del buque incendiado y aseguró que la prioridad es minimizar cualquier riesgo medioambiental.
También Acciona puso a disposición de los familiares de los afectados un número de teléfono, aunque muchos de los pasajeros ya habían avisado a sus allegados de lo sucedido y de que se encontraban bien y de vuelta a la capital balear. La naviera Trasmediterránea dispuso alojamiento en hoteles para todos los evacuados y organizará sus traslados de re- greso atendiendo a lo que cada uno de ellos solicite. “En estos momentos, lo más importante para la compañía es que los pasajeros y la tripulación se encuentren bien después de este grave y desgraciado accidente, en el que afortunadamente no ha habido que lamentar daños personales, gracias a la puesta en marcha de forma inmediata del protocolo de alertas y salvamento por parte de la tripulación, que ha contribuido a poder efectuar con rapidez y seguridad las labores de evacuación”, señala el comunicado de la compañía.
Personas de doce nacionalidades viajaban en el buque siniestrado. Además de españoles, iban a bordo ciudadanos de Alemania, Rumanía, China, Colombia, Ecuador, Senegal, Argentina, Senegal, Australia, Bulgaria y Argelia. Entre ellos se encontraba un bebé y 78 chóferes de camiones, que no transportaban ninguna mercancía peligrosa.
El buque incendiado este martes fue construido en el 2003 y cuenta con unas dimensiones de 186 metros de eslora por 25 metros de manga. Su capacidad es 954 pasajeros, 150 vehículos y 2.245 metros lineales de carga. Según Miguel Chicón, jefe del centro de coordinación de Salvamento Marítimo en Baleares, el barco estaba “en perfectas condiciones”.
La Autoridad Portuaria de Baleares no descartaba ayer que el
Sorrento pudiera hundirse en la posición en que se encuentra debido a la violencia del fuego iniciado en el costado de babor del buque calcinando las barcas de rescate que se encontraban en esa zona. Salvamento Marítimo indicó que se están tomando las medidas preventivas estipuladas ante la posibilidad de que el buque se vaya a pique en una zona de gran riqueza marina, según Oceana. La oenegé llegó a proponer su protección a las administraciones tras constatar una importante presencia de biodiversidad tanto de flora como de fauna.