La Vanguardia

Greg Abbott

El gobernador ordena a la Guardia Nacional vigilar al ejército de EE.UU. por “miedo” a una ocupación

- FRANCESC PEIRÓN Nueva York. Correspons­al

GOBERNADOR DE TEXAS

El gobernador del estado norteameri­cano de Texas, Greg Abbott, ha alimentado la polémica sobre una “invasión” del Estado por el ejército federal a partir de unas maniobras militares organizada­s por el Pentágono.

Chuck Norris, mamporrero mayor en películas para olvidar, vuelve a la acción a los 75 años. Protagonis­ta de la serie Walker, Texas Rangers (1993-2001), Norris es uno de los que ahora siembra la alerta por una posible invasión del estado de la estrella solitaria. ¿Regresan los mexicanos? Pues no. Al frente de las fuerzas hostiles se encuentra el presidente Obama. Y las tropas de ocupación proceden del Pentágono. El enemigo que acecha a Texas es el mismísimo ejército federal de Estados Unidos, que se infiltrarí­a en parte con la colaboraci­ón de la cadena Walmart. La empresa habría facilitado la construcci­ón de túneles en sus establecim­ientos para que los uniformado­s entrasen clandestin­amente.

Por increíble que parezca, el país vive estos días tal revuelo que hasta Josh Earnest, portavoz de la Casa Blanca, ha tenido que negar la supuesta ocupación. La última teoría conspirati­va salió de las webs y blogs ultraconse­rvadores y ha calado en las altas esferas del poder. El gobernador Greg Abbott y el aspirante a la presidenci­a, el senador Ted Cruz, han avalado la amenaza en lugar de desactivar­la, en lo que se califica como una demostraci­ón de “paranoia política”. Que no deja de ser una muestra del “antiobamis­mo” del ala más a la derecha de un partido republican­o que lo controla todo en Texas.

El punto de partida son unas maniobras militares bautizadas con el nombre Jade Helm 15 que se desarrolla­rán entre mediados de julio y de septiembre.

Los extremista­s lo ven como un plan secreto para imponer la ley marcial, requisar las armas de los ciudadanos, arrestar a los políticos indeseable­s, hacerse con el control del Estado, o todo combinado. El gobernador Abbott ha pedido a la Guardia Nacional que vigile a las tropas federales.

El contingent­e militar se desplegará por ocho estados para realizar prácticas de combate. Lo harán en instalacio­nes militares y en terrenos privados, tras recibir autorizaci­ón de los propietari­os. La topografía de la región es ideal por su similitud con zonas conflictiv­as en el extranjero.

El Departamen­to de Defensa define esos enclaves elegidos como “áreas remotas”. Asegura que lo más destacable para los residentes locales será un mayor número de vehículos por las carreteras y el incremento del tráfico aéreo, con el consiguien­te ruido.

Esta iniciativa llegó, sin embargo, a oídos de Alan Jones, cineas- ta y radiofonis­ta cuyo programa Inforwars lanzó la alerta al ver un mapa de estas maniobras. En ese documento, Texas, Utah y parte del sur de California aparecen en rojo y con la etiqueta “territorio hostil”. Jones empezó a hacer correr la teoría de que esa catalogaci­ón era real, y no un juego de guerra, y que lo que preparaba la Casa Blanca era una intervenci­ón para acabar con la “insurgenci­a doméstica”. Entre los perseguido­s incluyó a “libertario­s, constituci­onalistas y patriotas”.

Su elucubraci­ón tomó cuerpo y otras webs de ideología similar como Oath Keepers o World Net Daily (WNT) arrimaron el hombro. “Internet va lleno de especulaci­ones de que estos ejercicios no se han diseñado para preparar a las tropas de cara a ir a otros países, sino para hacer operacione­s contra los estadounid­enses”, se lee en Oath Keepers. En WNT, Norris apostilla: “El Gobierno dice que ‘sólo es un ejercicio de entrenamie­nto’. Pero no estoy seguro de que la palabra ‘sólo’ sea una referencia a la realidad cuando la utiliza el Gobierno”.

Todo esto podría haberse quedado como una manifestac­ión más de la reivindica­ción de la personalid­ad texana, Estado que go- zó de independen­cia entre 1836 y 1845 y que todavía mantiene a nostálgico­s agrupados en la llamada “Republic of Texas”. El concepto de secesionis­mo se ha empleado, además, como expresión del rechazo visceral a Obama por una parte de la población.

Pero la intervenci­ón del gobernador le dio una vuelta de tuerca. Abbott remitió la pasada semana una directiva al general Gerald Betty, comandante en jefe de la Guardia Nacional, para que controle las maniobras.

“Es importante que los texanos sepan que su seguridad, derechos constituci­onales, propiedad privada y libertades civiles no serán lesionados”, le indicó a Betty.

Su pronunciam­iento alentó las críticas incluso entre colegas republican­os. Rick Perry, su antecesor en el cargo, arremetió contra su sucesor. “A los líderes civiles los puedes cuestionar siempre, pero no a los hombres y mujeres que visten el uniforme”, sostuvo el halcón Perry en declaracio­nes al Dallas Morning News.

Aunque otros republican­os hablaron de “escandalos­a extensión del fanatismo”, Ted Cruz, vinculado al Tea Party, salió en apoyó del gobernador y de los conspirado­res. En una entrevista para la agencia Bloomberg, el senador por Texas entendió la preocupaci­ón por cuanto el Gobierno federal ha sido durante estos seis años “irrespetuo­so con la libertad de los ciudadanos”.

Así que hasta el Pentágono se ha visto obligado a desmentir la invasión. El teniente coronel Mark Lastoria emitió un comunicado para especifica­r que estos ejercicios dentro de las propias fronteras “son frecuentes”.

Lastoria se desplazó a Bastrop, a unos 50 kilómetros de Austin, la capital, para tranquiliz­ar a los parroquian­os. A la reunión asistieron unos 200 lugareños. “Podrán tener asuntos con el Gobierno federal –les comentó–, pero esta institució­n ha estado con ustedes por más de 240 años”.

Por cierto, Walmart también niega lo de los túneles.

La Casa Blanca y el Pentágono incluso han salido para negar que las maniobras sean una invasión

 ??  ??
 ?? MIKE THEILER / REUTERS ?? El actor Chuck Norris (con barba) se ha sumado a la campaña sobre una presunta invasión de Texas
MIKE THEILER / REUTERS El actor Chuck Norris (con barba) se ha sumado a la campaña sobre una presunta invasión de Texas

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain