La Vanguardia

Comediante de fondo

Santi Millán retorna a ‘El chiringuit­o de Pepe’ en Telecinco después de ayudar a otras personas en ‘El mur’ de TV3

- JOAQUIM ROGLAN Barcelona EL MUR

Formado en el Institut del Teatre de Barcelona, Santi Millán debutó en la televisión en el programa El día por delante, de TVE. Rondaba por entonces los veinte años, ya había ingresado en el grupo teatral La Cubana y había recorrido muchos escenarios con obras tan populares como Cómeme el coco, negro y Cegada de amor. Su carrera televisiva prosiguió en los inicios de TV3 en series de humor como Teresines SA y en Telecinco con Me lo dijo Pérez. Y poco después se asomó a la pantalla grande en El amor perjudica seriamente la salud. Con una capacidad de trabajo más que notable, su popularida­d se forjó junto a Andreu Buenafuent­e en la productora El Terrat y ganó un Ondas por el programa La cosa nostra, en el que encarnaba a un reportero. A menudo con un pie en Barcelona y otro en Madrid, trabajó para Telecinco en La última noche, un breve programa en el que comprobó por primera vez que el humor catalán no acababa de funcionar en el resto de España, mientras que con el mismo equipo y estilo de El Terrat arrasaba en su franja horaria en Radio Barcelona.

Desconoced­or de la palabra desánimo, intensific­ó su carrera cinematogr­áfica a las órdenes de directores como Santiago Segura en Torrente, Francesc Bellmunt en Lísistrita, y con Ventura Pons en Amor idiota, entre otros títulos de su ya considerab­le filmografí­a. Adaptable a todos los géneros, brilla muy especialme­nte en la comedia, cosa que también ha demostrado como actor y director de teatro. Dotado de un físico bien trabajado y de un rostro que desprende empatía a flor de piel, eso le ha permitido hacer hasta publicidad de calzoncill­os. De su temperamen­to interno lo dice casi todo el documental Imparables, que emitió Energy, y donde se le veía pedalear por las dunas compitiend­o en la Titan Desert junto a Josef Ajram. De que le regalasen una bicicleta a comerse el desierto hay un tramo que sólo se consigue recorrer con mucho esfuerzo, autodiscip­lina y sacrificio. Y de ahí al programa de TV3 El mur no hay más que un paso consistent­e en ayudar a otras personas a superarse a sí mismas para correr el maratón de Barcelona.

Su aspecto, casi tan juvenil como cuando comenzó a actuar, se combina con su cara de buena gente. Por eso El chiriguito de Pepe en Telecinco parece hecho a su imagen y semejanza. Un buen cocinero sobrado de estrellas que cambia de vida y, callada y secretamen­te, ayuda a su humilde familia, que pasa dificultad­es. En la vida real, cocina poco y lo que más le agrada es disfrutar de un refresco negro light y una bolsa de patatas fritas junto a su mujer y sus hijos.

De trato cordial y afable, trabajar tantos años en prácticame­nte todas las cadenas de televisión no le ha hecho subir la fama a la cabeza. Más arriba de su mirada, a veces pícara y casi siempre sonriente, hay un cerebro bien amueblado y una potente fuerza mental. Consciente de su oficio de comediante, es de aquellas personas que ayudan a reír y a pasar un buen rato. Lo que es de agradecerl­e, porque requiere mucha se

riedad de fondo.

 ??  ?? TV3 EL CHIRINGUIT­O DE PEPE TELECINCO
TV3 EL CHIRINGUIT­O DE PEPE TELECINCO

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain