Pulcinella fuera de lugar
OBC + Masaaki Suzuki
Lugar y fecha: L’Auditori (24/V)
Masaaki Suzuki parece un director cuidadoso, que aporta mucha y buena musicalidad en sus reconocidas versiones de Bach. Está especializado en repertorios de pequeño formato, del barroco y el clasicismo y los de afinidad neoclásica, casos de Britten o Stravinsky. Desde luego su versión de la Sinfonía n.º 40 de Mozart en este concierto fue, salvo detalles de articulación en el inicio, o de mayor agilidad en frases del Andante, muy agradable y convincente, con una cuerda homogénea en empaste, buen trabajo de los primeros violines y en gene- ral de los vientos, y una buena capacidad de generar fuerza expresiva.
La otra cara de la moneda fue hacer la música del ballet que Stravinsky escribió para el Pulcinella sobre temas de Pergolesi, para la que trabajó con Picasso y Diaghilev. En aquellos tiempos de final de la guerra Diaghilev ya había estrenado con Falla y Picasso el Tricorne en Londres y París, y, de hecho, la música de Pulcinella la había pedido antes a Falla, vista su experiencia en la pantomima-ballet. Era música de escenario pequeño, de modo que habría que haber pensado que en la sala de L’Auditori se perdería. Y de hecho así fue; la soprano –especializada en músicas antiguas– era inaudible, como lo fue el solo de violín. Es orquesta de concerto grosso y ambos solistas podían haber sacado más provecho de su trabajo si el espacio hubiese sido más reducido.
En cuanto a la versión que escuchamos, salvo algunas dificultades de solistas de vientos, lo que quedó fue un escaso juego de contrastes; se descuidó la dicción y la teatralización en los cantantes (el compositor se inspiró en la commedia dell’arte...). Esta orquesta debe pensar en serio sus programas; deben estar en un contexto, ser convenientemente explicados y no ser sólo los directores los que de paso establezcan sus criterios; debe prevalecer una dirección artística de conjunto, y dudo que de momento desde Tokio se pueda hacer algo. ¿No tiene L’Auditori un área del conocimiento? ¿El famoso Centre Gerhard? De momento, una commedia con cierta tristeza, como la que dejan los jóvenes acomodadores en conflicto a sus puertas. ¿No puede haber una mediación y que, por fin, prevalezcan la razón y el interés general?
JORGE DE PERSIA