El imperio contraataca
Washington continúa preocupada por “la actividad militar de Rusia en Ucrania”
Para dar tranquilidad a sus aliados frente al poder de Rusia, Washington anuncia que enviará por primera vez a Europa el novísimo F-22 Raptor, considerado uno los mejores aviones de guerra actuales.
Los aliados europeos que siguen viendo a Rusia como un potencial invasor no tienen nada que temer. Ese podría ser el mensaje de Washington tras anunciar que enviará por primera vez a Europa el novísimo cazabombardero F-22 Raptor, considerado como uno los mejores pájaros de guerra actuales, algo que ya pudieron demostrar el año pasado al entrar en acción en Siria contra posiciones del Estado Islámico.
La responsable civil de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, Deborah Lee James, ya insinuó en junio durante una visita a París, que su país podría dar este paso. Pero lo confirmó el martes en un encuentro con la prensa en Washington.
“La actividad militar rusa en Ucrania sigue siendo una gran preocupación para nosotros y para nuestros aliados europeos”, explicó. “Este primer despliegue de entrenamiento” se realiza para “demostrar a nuestros socios nuestro compromiso con la seguridad y la estabilidad en Europa”.
Después de la anexión por parte de Rusia de la península ucraniana de Crimea y tras el estallido de una guerra en el este de Ucrania entre el Gobierno de Kíev y los separatistas prorrusos aumentó en los países vecinos el temor hacia Moscú. Los antiguos países del bloque comunista, o los que formaron parte de la URSS, como las repúblicas bálticas de Estonia, Letonia y Lituania, acusan a Rusia de haber entrado en Ucrania usando militares sin insignias y temen que en el futuro puedan ser víctimas de su codicia.
El Kremlin, sin embargo, ha negado todas las acusaciones. Moscú insiste en que los rusos que han luchado junto a los separatistas eran voluntarios, o militares en su periodo de vacaciones.
El diputado ruso Franz Klintsévich, que forma parte del Comité de Defensa de la Duma, dijo que los militares rusos están “observando con atención” la situación y que están preparado para reaccionar en caso de alguna agresión. Según recoge el portal en inglés de RT, Klintsévich aseguró que Moscú ha tomado nota de la acumulación de fuerzas de la OTAN, así como de la retórica occidental sobre la “agresión rusa”.
En junio Washington ya anunció que iba a enviar armamento pesado de la Alianza Atlántica a los países del Este de Europa , entre este, 250 tanques. No se trata, sin embargo, de enviar soldados al viejo continente, sino de almacenar el material militar para usarlo en circunstancias concretas, “en rotaciones por motivos de entrenamiento”, dijo entonces en Bruselas el embajador estadounidense ante la OTAN, Douglas Lute. Ese material se desplegaría en bases aliadas en Estonia, Letonia, Lituania, Bulgaria, Rumanía y Polonia.
James no especificó ni cuándo ni dónde se desplegarán los F-22. Motivos de seguridad así lo aconsejan. El general Mark Welsh III, jefe del estado mayor de la Fuerza Aérea, señaló que viajarán “a las instalaciones que potencialmente usaríamos en un conflicto en Europa”.
El F-22 Raptor es un caza de quinta generación que desarrollaron las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en los años de 1990. Entraron en servicio en el 2005 y sólo en- traron en combate a finales del año pasado en Siria, al participar en operaciones contra el Estado Islámico. Washington asegura que no hay avión de guerra que se le pueda comparar. Cada unidad está valorada en 143 millones de dólares.
El F-22 se unirá a los F-15, F-16 y A-10 que EE.UU. ha estado usando en maniobras militares en Europa. Todo forma parte del esfuerzo del Pentágono para tranquilizar a los aliados de Estados Unidos. El lunes, 400 paracaidistas de la Alianza realizaban ejercicios en dos aeródromos de Bulgaria como parte de las maniobras Swift Response 15, según Washington los ejercicios militares aéreos más importantes en Europa desde el fin de la guerra fría. En ellos participan 4.500 militares de 11 países de la OTAN.