El crudo va a la baja
La Agencia de la Energía prevé la cifra más baja de barriles desde 1992
El exceso de producción de petróleo, impulsado intencionadamente por Arabia Saudí, está llevando a una caída en la extracción de crudo en los países de fuera de la OPEP, mientras el precio del barril sigue a la baja, amenazando con caer hasta los 20 dólares.
Los suministros de petróleo de fuera de la OPEP el año que viene se reducirán más que nunca en dos décadas en tanto la caída del precio frena la producción de crudo de los Estados Unidos, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE). La producción de fuera de la Organización de Países Exportadores de Petróleo caerá unos 500.000 barriles diarios, a 57,7 millones, en 2016, según hizo público ayer el organismo asesor con sede en París en su informe mensual.
Si bien este año la demanda de combustible será la más grande desde 2010, las reservas de crudo de los países desarrollados, que alcanzaron máximos récord, sólo empezarán a decrecer en la segunda mitad del año que viene, y la reanudación de las exportaciones iraníes con el levantamiento de las sanciones podría incrementar la oferta aún más, expresó la agencia. La caída de la oferta total de fuera de la OPEP el año que vie- ne será la más grande desde la de un millón de barriles de 1992, tras la disolución de la Unión Soviética, según la AIE.
La reducción del suministro de fuera de la OPEP demuestra que la estrategia de Arabia Saudí de defender la cuota de mercado del grupo presionando a los rivales con precios más bajos “parece estar teniendo el efecto buscado”, señaló la AIE. Los futuros de crudo Brent cayeron al nivel más bajo en seis años de cerca de 42 dólares el 24 de agosto. La producción podría no reducirse con suficiente celeridad para eliminar el excedente mundial y los precios podrían caer hasta los 20 dólares, según Goldman Sachs.
En consecuencia, la producción estadounidense reducirá en casi 400.000 barriles diarios el año que viene en tanto los contratos de futuros para 2016 se negocian por debajo del precio que se necesita para cubrir gastos, expresó la agencia. En julio, la AIE proyectaba que la oferta estadounidense crecería 60.000 barriles.