Malala y los sirios
Estos días en que se está produciendo este éxodo masivo de personas buscando hogar ha
coincidido que estoy leyendo la biografía de Malala Yousafzai, premio Nobel de la Paz en el 2014. Hay unas palabras suyas que deseaba recalcar para quienes dudan de ayudar a los refugiados sirios: “Me parece que el mundo entero es como una familia. Cuando uno de nosotros sufre, todos debemos acudir y ayudar”. Esta niña luchó por defender los derechos de los niños en la educación, de las mujeres para salir a la calle, etcétera. En defini- tiva, por buscar la democracia y la paz en Pakistán. Los talibanes le dispararon acusándola de no someterse a un islamismo que ella no podía practicar porque es contrario a lo que dice el Corán.
Sufrió la guerra, fue perseguida, amenazada y tuvo que huir, como tantos sirios actualmente. También dice en el libro: “No pueden disparar a mis sueños, no pueden matar mis convicciones”.
Si alguien pone en duda los sueños de los sirios hacia una vida mejor, desearía que se leyera esta biografía y quizá cambie de opinión. CRISTINA CASALS MASSÓ Suscriptora Esplugues de Llobregat