Todo pundonor
JOSÉ LUIS PÉREZ CANCA (1971-2015) Jugador de balonmano
Aunque era bajito para jugar de central (1,81), lo suplía con su pundonor. El mismo que ha demostrado durante tres años y medio de lucha contra un cáncer de páncreas que se le detectó poco después de retirarse del balonmano con 39 años. José Luis Pérez Canca, Pepelu para los íntimos, nacido en Málaga hace 44 años, ha perdido finalmente el partido más importante. Pero luchó hasta el final sin dar un balón por perdido.
Pérez Canca dedicó toda su vida al balonmano, desde su debut en el Maristas malagueño, con el que ascendió a la Liga Asobal en 1990. Su juego y sus números le llevaron a un grande, el Ademar León, donde viviría una etapa llena de éxitos junto a nombres históricos como Juanín García, Alberto Entrerríos o José Javier Hombrados.
Pese a la durísima competencia que suponía, y supone, la presencia del Barcelona, dirigido entonces por Valero Ribera, Pérez Canca pudo saborear las mieles del éxito con el equipo leonés. Ganó una Copa Asobal y la Recopa de
Europa en la temporada 1998/99. Con España logró la plata en el Europeo de Italia en 1998.
Su escasa estatura para los parámetros actuales del balonmano la suplía con una gran velocidad en el uno contra uno. Además, era un gran director de orquesta que hacía bailar a sus compañeros.
En el año 2000 el Balonmano Ciudad Real pagó su cláusula de rescisión y en el equipo manchego conquistó dos recopas más (2002 y 2003) y una Copa del Rey. En Ciudad Real coincidió con otros grandes nombres del balonmano como Talant Dujshebaev o Rolando Uríos. Tras su etapa en Castilla-La Mancha se refugió en el Granollers, cuyos colores defendió durante cinco temporadas. Tras dos años en Antequera, cerca de su casa, se retiró finalmente en el 2010.
Poco después se le descubriría la enfermedad que finalmente ha acabado con su vida. “Una situación así te ayuda a ver las cosas importantes de la vida y eres incluso más feliz. Disfruto más con los pequeños detalles, como pasar una tarde con mi mujer y mi hija”.