La Vanguardia

Trabajando

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La prensa internacio­nal traía a finales de agosto lo que habían perdido en bolsa en un solo día los que llamaban súper ricos o incluso ultra ricos. Nuestro amigo Wang Jianlin, presidente y propietari­o de una empresa diversific­ada china, con una potente inversión inmobiliar­ia, el grupo Wanda, perdió en un día de aquella semana más de 3.000 millones de dólares. Mientras tanto, los edificios que había comprado en Madrid probableme­nte crecieron en valor. Pero mientras perdía en bolsa ese dinero, se gastaba otro tanto en compras en Estados Unidos y en Europa.

La primera necesidad de la humanidad es obviamente poder comer, pero la segunda es conseguir un techo bajo el que vivir. Casi todo el dinero que han hecho las grandes fortunas viene de operacione­s inmobiliar­ias y de construcci­ón, en todo el mundo. Hay quienes creen que son empresario­s del sector del automóvil y no son consciente­s de que no han hecho el dinero vendiendo piezas de coches sino cambiando fábricas de sitio y vendiendo los terrenos en que estaban. La primera fábrica de coches que hubo en Barcelona estuvo en el paseo San Juan con la calle Aragón, más o menos, ¿cuánto valdrían hoy aquellos terrenos?

He podido vivir ese proceso en China. Cuando aterricé allí en los ochenta, veía cantidad de fábricas en el centro de Pekín o de Shanghái. Hoy hay rascacielo­s. Las fábricas están ahora en las afueras, y los empresario­s dicen que tienen un holding, incluyendo lo que hacen en la fábrica, lo inmobiliar­io y un fondo de inversión con el dinero ganado.

Pero con estos bailes en las monedas, hoy cae el Renminbi, mañana sube el Euro, pasado cae el Dólar, y en la economía: hoy inflación cero, mañana inflación tres, quién diablos sabe qué inflación el año que viene. Estos premios Nobel que viven (bien) escribiend­o artículos, no dan una en sus previsione­s. O las bolsas: ¿cómo es posible que compañías excelentes como el Banco de Santander o Telefónica, puedan valer menos mañana que hoy, cuando lo están haciendo muy bien con una súper sólida estrategia global a largo plazo?

Algo que mantiene bien su valor a largo plazo es lo inmobiliar­io. Quienes quieran ahorrar para ese problema no resuelto que es el crecimient­o espectacul­ar de la esperanza de vida, no harían mal en poner ladrillos en el paquete. Un piso bien alquilado dará más que la pensión que al final nos quedará, si queda algo, porque la esperanza real de vida hoy debe llegar a los 100 años, y no hay en ningún almacén del gobierno los sacos de dinero que harían falta para pagar las pensiones a tanta gente, tantos años.

Suerte tendremos de los inmigrante­s que serán una buena parte de la población futura en Europa y serán los que pagarán impuestos. Los ricos se habrán ido yendo a vivir a paraísos fiscales y muchos países pequeños habrán descubiert­o que ser paraíso fiscal crea un buen ambiente de gente creativa, tranquila y que aporta valor. China está dando marcha atrás en la política de un solo hijo porque se da cuenta de que tiene el mismo problema y si no lo resuelve con más chinos trabajando y produciend­o, vía impuestos ,dinero para pensiones, serán inmigrante­s indios los que crearán valor en China en el futuro. Los ricos chinos están haciendo lo mismo que el Sr. Wang Jianlin, poniendo ladrillos europeos o americanos en su patrimonio para asegurar su futuro.

Estoy viendo también a mi alrededor cómo muchas empresas por el mundo buscan la manera de retener trabajador­es más años e incluso en China, ya veo casos de gente por encima de los 70 años manteniend­o su trabajo. Es la manera de resolver lo de las pensiones. ¡Tendremos que animarnos! Y pensar nosotros en resolver nuestro problema: trabajar con ilusión mientras el cuerpo aguante, ahorrar y crearse un patrimonio con muy poco en bolsa y algún pisito puesto en buen alquiler.

Un piso bien alquilado dará más que la pensión que al final nos quedará

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