Potencias militares
Los responsables de Defensa de Estados Unidos y Rusia han abierto negociaciones para hallar un “denominador común” sobre la situación en Siria y la lucha contra el Estado Islámico.
El Pentágono informó ayer de la apertura de conversaciones entre el secretario de Defensa, Ashton Carter, y su homólogo ruso, el ministro Serguéi Shoigú, en busca de un “denominador común” sobre la situación del campo de batalla en Siria y el combate contra el Estado Islámico (EI). Carter y Shoigú hablaron por teléfono por primera vez desde que el secretario de Defensa tomo posesión de su cargo hace siete meses en lo que supone un principio de reconciliación entre ambas potencias, tras el deterioro de sus relaciones a consecuencia de la anexión rusa de Crimea y el conflicto de Ucrania.
Este deshielo se produce tras el aumento de la tensión entre am- bas potencias por el envío que hizo Moscú de tropas y armamento a Siria. Rusia mantiene una estrecha alianza con el régimen de Bashar el Asad, un dictador sanguinario que Washington considera necesario desalojar del poder para conseguir una paz duradera en la zona, pero tanto Rusia como EE.UU. coinciden en la necesidad de acabar con el EI.
Peter Cook, secretario de prensa del Departamento de Defensa, describió la conversación de Carter y Shoigú como “constructiva” en su objetivo de establecer “mecanismos de desconflictivización” que pasan por precisar en lo que ambas potencias están de acuerdo y en lo que no.
La conversación duró más de una hora y ambos ministros acordaron continuar las consultas, según informó el portavoz del Mi- nisterio ruso, Ígor Konashenkov, quien aseguró que en las posiciones de Estados Unidos y Rusia sobre Siria “hay más coincidencias que divergencias”.
Antes de la conversación telefónica, el secretario de Estado, John Kerry, anunció en Londres la apertura de las conversaciones “entre militares” como “un paso muy importante” decidido por el presidente Obama. “Nuestro objetivo sigue siendo la destrucción de Estado Islámico y también un acuerdo político con respecto a Siria, que creemos que no se puede lograr con la presencia a largo plazo de Asad en el poder”, dijo Kerry. “Estamos buscando un denominador común –añadió– porque para conseguir una solución política a un conflicto no hay más remedio que establecer conversaciones”.