En la noria emocional
El equipo de Benítez enlaza goleadas con periodos de sequía realizadora
Tres días después de la euforia que provocó el retorno al liderato, de nuevo el bajón por el empate a cero del Bernabeu ante un Málaga penúltimo. El Madrid ahora mismo es una noria emocional, incapaz de estabilizar su juego, un equipo que tan pronto enlaza tres goleadas seguidas (5-0 al Betis, 0-6 al Espanyol y 4-0 al Shakhtar), como de pronto se atasca y hace tres goles en tres partidos, dos ellos además con grandes dudas sobre su legalidad, (el único al Granada y el primero al Athletic). En el club cunde la preocupación. Benítez no da con la tecla y se escuda en que todo se debe a una falta de puntería ocasional. Lo cierto es que hoy día el Madrid es cualquier cosa menos fiable y a la vuelta de la semana espera el derbi con el Atlético.
Lo que tan poco falla es la mala suerte con las lesiones. Jesé se unió el sábado a una enfermería en la que siguen Sergio Ramos, James, Bale y Danilo, y por la que ya han pasado Pepe y Benzema (y antes Illarra). El cuerpo médico no para de atender lesiones musculares. Ramos, James y Bale podrían estar para el Calderón, pero todo dependerá de si Benítez quiere arriesgar o no.
Quien tampoco está pasando por un buen momento es Cristiano, ante una de sus peores rachas desde que debutara con los blancos. Tras seis jornadas de Liga, el portugués suma cinco tantos, los mismos que en la temporada 0910, pero la mitad de los que llevaba, por ejemplo, el año pasado. Lo más curioso del caso es que los cinco goles los ha marcado en un solo partido, ante el Espanyol. Y luego lleva otros tres en Champions, los tres al Shakhtar, como si se empeñara en hacer buena la teoría del ketchup de que los goles o no salen o salen de golpe.
Ante el Málaga a Cristiano se le vio especialmente desesperado. De los 31 remates a puerta efectuados por el Madrid, el portugués protagonizó trece de ellos, nueve entre los tres palos. Kameni le desquició como sólo antes lo había hecho otro portero, Kiko Casilla. Tal es así que acabado el partido Rafa Benítez habló de saber manejar la ansiedad como la asignatura pendiente del equipo: “Estuvimos ansiosos en los últimos minutos. En los cinco últimos debimos mantener más la calma y seguir moviendo el balón. No es fácil y estamos al inicio. Crear tanto me parece muy positivo, pero no evitar sus salidas y aguantar la presión es algo que hay que manejar mejor”.
Sin embargo, tampoco Benítez salió bien parado de la lectura del partido. Por primera vez en la temporada el Madrid se quedó con dos cambios por hacer cuando el equipo daba muestras de falta de frescura arriba. Preguntado al respecto, el técnico justificó el hacer sólo un cambio –el del lesionado Jesé por Kovacic– porque “preferí antes la precisión que la energía”. Un palo para todo el banquillo en un día en el que los que jugaban si algo les faltaba era sobre todo finura en el pase y precisión en el remate. Con todo, el Madrid no se plantea ampliar su fondo de armario. La idea es que cuando se recuperen los lesionados bastará. Habrá que ver qué pasa en el Calderón.
LA RACHA NEGATIVA Cristiano iguala su peor arranque, con cinco goles en seis partidos, sólo que todos marcados al Espanyol