Junts pel Sí advierte a la CUP y cierra filas con Mas
La coalición reafirma al líder de CDC como candidato a president
No es la situación deseada, porque Junts pel Sí no quería depender de la CUP. Pero la realidad se impone y la coalición ha empezado a gestionar un resultado que, con todo, considera que le legitima para seguir adelante con un proceso soberanista que, como formación independentista más votada –62 diputados frente a los 10 de la CUP–, entiende que, además, le corresponde pilotar.
Con esta premisa sobre la mesa, los integrantes de la coalición –CDC, ERC y las entidades soberamayor
nistas de la sociedad civil– analizaron ayer, juntos y por separado, el nuevo escenario creado y se reafirmaron en la voluntad de aplicar la hoja de ruta pactada. Y, en este contexto, todos ellos cerraron filas en torno a Artur Mas como el candidato a la reelección como presidente de la Generalitat que, al menos de momento, nadie dentro de Junts pel Sí cuestiona. “El candidato a la presidencia de la Generalitat es Artur Mas, y a partir de aquí negociaremos”, zanjó Raül Romeva después de una reunión de la plana de la coalición y a modo de resumen del planteamiento con que asume la negociación para asegurar la investidura, para formar Govern y, en fin, para poner en marcha la legislatura.
La confluencia en torno a la figura de Artur Mas es la primera respuesta al aviso lanzado por la CUP durante toda la campaña electoral, y reiterado ayer mismo, de que bajo ningún concepto pensaba investir al líder de CDC. Una confluencia que el presidente de ERC, Oriol Junqueras, también avaló sin reservas al recordar que el compromiso con la hoja de ruta es total y que, a partir de aquí, los acuerdos con otras formaciones dependerán de hasta dónde éstas quieran llegar en este “proceso extraordinario”. Pero fue el propio Artur Mas quién en este terreno se expresó en términos más severos y lanzó una advertencia a la CUP para que no tenga la tentación de hacer descarrilar el proceso soberanista.
“El gran tema era el plebiscito, y el plebiscito se ha ganado para el sí, de manera que lo que tenemos que saber ahora es si los 72 diputados están dispuestos a sacar adelante la hoja ruta para construir un Estado independiente, y el resto son cosas añadidas”, remarcó el presidente de la Generalitat. La tesis que sostuvo es que Junts pel Sí y la CUP tienen una “responsabilidad compartida”, porque “la mayoría es conjunta”, y ante ello dejó una pregunta muy elocuente en el aire: “¿Verdad que no frustraremos el mandato democrático?”. Una responsabilidad que “primero le toca asumir a Junts pel Sí, pero después también a la CUP, porque cuando
MENSAJE Aviso de Mas a la CUP: “¿Verdad que no frustraremos el mandato democrático?”
NUEVO ESCENARIO
Junts pel Sí reclama una reflexión al Estado ante la mayoría absoluta independentista
una responsabilidad es compartida la tienen que ejercer todos”, precisó. Y este es el mensaje que sin demora ha trasladado al número uno de la candidatura de la CUP, Antonio Baños, con quien ayer tenían previsto ponerse en contacto tanto Artur Mas como Raül Romeva.
Dentro de Junts pel Sí todo el mundo es consciente de que, con los resultados finalmente obtenidos, la CUP tiene la sartén por el mango para decidir la investidura, pero también de que el proceso soberanista no puede permitirse prescindir de nadie. Por este motivo, la carta de que su candidato a la reelección al frente del Govern de Catalunya es el actual presidente de la Generalitat piensa jugarla a fondo, entre otras razones porque CDC considera que es una “apuesta irrenunciable” y porque ERC tampoco está para “dar demasiada cancha” a la CUP.
Los próximos días, pues, se prevén intensos, porque, además de la investidura, la coalición piensa también en un “Govern de concentración de amplio espectro y con sensibilidades diferentes”, en el que pudieran estar la propia CUP e incluso a Catalunya sí que es Pot, y se plantea igualmente hablar con el resto de grupos sobre política social, política económica y transparencia para “conformar mayorías concretas sobre la gestión ordinaria”. Los dirigentes de Junts pel Sí, por otro lado, confían en que la mayoría absoluta de diputados independentistas que por vez primera existe en el Parlament haga reflexionar al Gobierno español y esperan una respuesta en esta dirección, porque “sería inconcebible que siguiera sin pasar nada”, se lamentó Raül Romeva. Pero, de momento, la reacción ha ido en sentido contrario.