Albiol apuesta por abrir la reforma de la Constitución
Malestar en el PPC por la presencia en campaña de Rajoy
El PP catalán trató de digerir ayer en privado sus malos resultados el 27-S –pasó de 19 a 11 diputados, lo que le sitúa en los escaños de AP en 1984–, apenas mitigados por el hecho de que el voto independentista quedara por debajo del 50% y “haya perdido el plebiscito”, y empezó a preparar el terreno a una vía que desencalle la cuestión catalana.
Así, el líder parlamentario, Xavier García Albiol, negó cualquier posición inmovilista, una de las críticas recurrentes al PP y el Gobierno de Mariano Rajoy, y consideró probable que en “un futuro más o menos lejano” se abra el proceso de negociación de la reforma de la Constitución.
Con el aval de la Moncloa para explorar vías de negociación, Albiol sólo puso una condición para abrir el proceso constitucional para actualizar la arquitectura territorial y mejorar la financiación: que exista de entrada un clima de lealtad constitucional y de respeto a la legalidad. “No vamos a reformar la Constitución para dar satisfacción para los que quieren romper”, eso está claro.
En la reunión, por la mañana en la sede del PP hubo autocrítica, pero no muchas. “He estado a la altura de las circunstancias como candidato”, dijo Albiol, que recordó que los sondeos señalaban en julio que sólo alcanzarían seis diputados en la Cámara.
Resonaron, además, las quejas de algunos sectores de la dirección por el protagonismo que tuvieron en el tramo final de la campaña el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y otros miembros del Ejecutivo popular, al considerar que fue más un “lastre” que una ayuda para la movilización.
Consideran estos sectores de la dirección popular, los más alejados desde hace tiempo a las tesis de Rajoy, que ese desembarco de el presidente y de miembros del Ejecutivo –Santamaría, Margallo, Cospedal– ha acabado por restar protagonismo a Albiol.
Tanto por “distorsionar” con su mensaje “institucional” el llamamiento a “plantar cara” con el que se había presentado el exalcalde de Badalona, como por la imagen vinculada a la corrupción y los duros recortes económicos y sociales que –entienden–lleva sobre sus espaldas.
Una posición que no comparte otra parte de la cúpula del PP, la más cercana a Rajoy, que defiende que sin la irrupción del presidente en campaña los resultados el 27-S hubieran sido “mucho peores”.
Después de la reunión de la ejecutiva del PP, Abiol orilló ese malestar que hay en su equipo con la estrategia diseñada por La Moncloa. “Estoy muy satisfecho con la presencia de Rajoy”, afirmó el dirigente popular, quien recordó que en la campaña de 2012 el presidente del Gobierno también participó hasta en cinco ocasiones y el PP obtuvo los mejores resultados de su historia.
Ya en Madrid, después de la reunión con la dirección en la calle Génova 13, Albiol defendió a Rajoy de las críticas de José María Aznar y pidió “respeto” por el trabajo en “difíciles circunstancias” que desarrolla el partido.
LEALTAD INSTITUCIONAL El exalcalde avisa de que la reforma no será para dar “satisfacción a los independentistas”