ICV y Podemos toman nota para las generales de sus errores en el 27-S
Pasados ya tres días del desastroso resultado de las elecciones catalanas, los aliados en Catalunya Sí que es Pot empiezan a anotar en su lista de tareas pendientes los errores que deben corregir antes de concurrir juntos a las elecciones generales de diciembre. Ninguna de las cuatro organizaciones se ha planteado la idea de renunciar a la confluencia pactada en julio pasado y que les compromete a formar una candidatura con activistas catalanes de Podem, Iniciativa per Catalunya, Esquerra Unida y Equo . El líder de la candidatura todavía está por decidir y –por el momento– será propuesto por Podemos.
La ejecutiva de ICV se reunió ayer y más allá de reconocer el desastre no hubo críticas a la estrategia de confluencia. El sábado la comisión nacional volverá a evaluar los resultados y no se esperan voces muy críticas. En Iniciativa la mayoría es consciente de que solos el resultado podría haber sido aún peor.
Lo que no significa que no haya cosas que cambiar y en esta cuestión hay opiniones diversas. Hay quien cree que el nombre, Catalunya Sí que es Pot, era desastroso antes de las catalanas y ahora lo sigue siendo y encima está quemado. Antes del 27-S, los impulsores de la candidatura llamaron a la puerta de Barcelona en Comú para pedir la denominación “en comú”, de la que es titular el equipo de Ada Colau, pero no se lo concedieron. I no parece que vaya a cambiar ahora para las generales.
La campaña catalana demostró también que el poderoso aparato mediático que acompaña a Podemos llena los mítines pero, al menos esta vez, no llena las urnas. Cómo encontrar la medida justa que incorpore al electorado de Podemos y no ahuyente al de Iniciativa es otro asunto que habrá que resolver. Hay quien propone que los líderes de ICV hagan actos por separado de los de Podemos, pero esa propuesta no convence porque, recuerdan, el problema no son los actos más o menos masivos, es el mensaje. Y en este punto hay problemas de fondo: algunos líderes de Iniciativa creen que Podemos ha de definir más claramente su modelo territorial para España si quiere resultar realmente convincente en Catalunya. No basta con defender el derecho a decidir. Hay que definir cómo se articula la diferencia en España y ahí Podemos no acaba de fijar un mensaje.
Entre tanto, y a pesar del traspiés de las catalanas, la construcción de proyectos de confluencia con Podemos en otros territorios de España sigue su curso. Tras la firma del acuerdo en Galicia el pasado viernes, ayer los líderes de Compromís ratificaban su voluntad de cerrar un pacto en Valencia.
JAUME V. AROCA