Intensidad expresiva

Simfònics al Palau Intérpretes: Orquestra Simfònica del Vallès. Cor de Cambra de Granollers, Cor Jove i Cor infantil Amics de la Unió. ARSinNova Cor de Cambra i Cor d’Homes d’Igualada. Ximena Patricia Agurto, Jordi Domènech y Toni Marsol, solistas Dirección: Rubén Gimeno Lugar y fecha: Palau de la Música Catalana (26/IX/2015)

Con un éxito de público formidable comenzó su temporada en el Palau de la Música la Orquestra Simfònica del Vallès. Cierto es que los coros convocan a muchos espectadores, y más en conjunción con el Carmina Burana de Orff, pero no lo es menos que su selección fue muy acertada para la ocasión. La orquesta superó desajustes, mostrando un muy buen espíritu de trabajo con su director Rubén Gimeno, preciso, que provocó una versión de intensidad expresiva tanto en el Debussy como en el Orff.

Abrió la sesión con una ajustada versión del Prelude à l’après midi d’un faune de Debussy con muy buen trabajo en las maderas, en particular la flauta solista. El enlace inmediato con la cantata de Carl Orff –sin mediar aplauso– creó un clima acertado, contrastante, uno de los signos de la sesión. Buena potencia, afinación y atención de los diversos grupos corales, desde las voces masculinas hasta la ternura de las voces blancas del Cor Infantil Amics de la Unió. Granollers puede estar orgullosa.

La OSV se mostró como nunca en la calidad y la apuesta por el trabajo. El buen nivel de solistas aportó carácter: el barítono Toni Marsol muy en vena operística y con personalidad, potencia y timbre adecuado; la soprano Ximena Agurto y el contratenor Jordi Domènech completaron esta buena actuación vocal. No hubiese estado de más un desliz pedagógico proyectando los textos, o completando las escasas notas al programa con ellos. El contexto en que se presentó esta cantata en tiempos de Hitler merece también una explicación.