La Vanguardia

IRRITACIÓN DEL PAPA

-

Ignazio Marino dimitió pero dejó en el aire la posibilida­d de reconsider­ar su decisión transcurri­dos los 20 días que la ley fija para que la renuncia se haga efectiva. Se siente víctima de un complot de su partido, dirigido por el propio primer ministro, Matteo Renzi, que desde hacía tiempo quería sacarse de encima a un alcalde débil y problemáti­co en la capital. Marino cometió errores de bulto al presentar cuentas de restaurant­es en los que había comido o cenado con la familia pero que atribuyó a compromiso­s institucio­nales, incluida la invitación a un embajador extranjero que desmintió haber cenado con el alcalde. Luego se filtró que quizá se equivocó la secretaría del alcalde al procesar las facturas, muchos meses después. En cualquier caso, se trató de un comportami­ento sospechoso. Marino ya tuvo un problema similar en Estados Unidos. Al alcalde no lo ha defendido ni el Vaticano, sino todo lo contrario. Marino tuvo un roce con el mismo papa Francisco. El Pontífice no ha olvidado la llamada que le hizo, el último día del sínodo extraordin­ario sobre la familia, el año pasado, para anunciarle que iba a registrar como legales matrimonio­s homosexual­es realizados en el extranjero. El Papa consideró de mal gusto llamarlo por eso justo cuando acababa el sínodo. Francisco se irritó también recienteme­nte, cuando Marino dijo que se había desplazado a Filadelfia, por invitación del Papa, para asistir al Encuentro Mundial de las Familias. En el avión que lo devolvía a Roma, Francisco dijo a la prensa, con gran énfasis, que él no había invitado al alcalde. Lo puso en evidencia. A Marino lo sustituirá ahora, temporalme­nte, un comisario nombrado por el prefecto de la provincia de Roma. Lo más probable es que, en mayo próximo, se celebren nuevas elecciones. No puede descartars­e del todo que el dimisionar­io alcalde intente un golpe de efecto y se vuelva a presentar, al frente de una lista cívica, con apoyos de la izquierda, para aguar la fiesta al PD. Los comicios serán un test para Renzi. El centrodere­cha intentará recuperar el poder. Y el partido de Beppe Grillo, el Movimiento 5 Estrellas, jugará la carta de la anticorrup­ción y querrá demostrar que está al alza y tiene líderes con gancho para gobernar Roma.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain