Sánchez resume el mandato de Rajoy en “paro, desigualdad y corrupción”
Rivera lamenta que el bipartidismo deje una España “democráticamente tocada”
“Paro, desigualdad y corrupción”, resumió Pedro Sánchez. Aún antes de que Mariano Rajoy compareciera en la Moncloa para poner punto y final a la legislatura, el jefe de la oposición, aprovechando un acto que protagonizó en Toledo antes de saltar a Canarias, ya hizo un demoledor balance del mandato del líder del PP.
“Si algo tienen claro los españoles es que Rajoy ha demostrado durante estos cuatro años ser un fraude”, atizó el líder del PSOE. “Ha mentido sistemáticamente a los españoles”, acusó. Y recordó que Rajoy ganó las elecciones del 2011 prometiendo bajar los impuestos y el paro, y además que no iba a tocar la sanidad, la educación, la dependencia, la cobertura por desempleo, las pensiones... “Todo mentira”, lamentó.
A juicio de Sánchez, el líder del PP no puede ser garante de la estabilidad política y económica por mucho que lo proclame. Al contrario: “La continuidad de Rajoy pone en riesgo la recuperación espoleada por los buenos vientos que nos vienen de fuera”.
El presidente del Gobierno llega en definitiva a las elecciones, según el líder del PSOE, “agotado, sin proyecto político para España –nunca lo tuvo–, incapaz de regenerarse y de responder con contundencia a los casos de corrupción que le afectan en primera persona”. El PSOE, además, lanzó
ayer una campaña para presentar las elecciones del 20-D como un combate con sólo dos contendientes: “Pedro o Rajoy”.
Lo cierto es que ayer lo otros grupos que precisamente tratan de romper esa batalla a dos también replicaron al presidente del Gobierno.
El líder de Ciutadans, Albert Rivera, hizo una valoración negativa de la legislatura, aunque reconoció que en el plano económico Rajoy evitó que España fuera intervenida por la troika. Aún así, lamentó que el Gobierno dejé una sociedad española fracturada socialmente después de los recortes en sanidad y educación y “muy tocada democráticamente” por los casos de corrupción y la politización de la Justicia.
Frente a esta situación, de la que culpó también al PSOE, auguró que el 20-D, si el bipartidismo sale derrotado en las urnas, sea el inicio de una “segunda transición” en España. Un cambio al que invitó a sumarse a “la mayoría de catalanes” para que España y Catalunya “funcionen mejor”.
El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, consideró que “por fin” termina ya una larga legislatura caracterizada a su juicio por haber traído “más corrupción que nunca” y también “más desigualdad”. Dicho lo cual, Iglesias se apresuró a reivindicar su posición de líder de un partido emergente y con futuro: el de un “nuevo país” que no estaba en el Congreso de los Diputados, indicó. “Ese nuevo país ha llegado ya a gobernar los nuevos ayuntamientos y aspiramos a que llegue no sólo al nuevo parlamento que saldrá del 20D sino también a la Moncloa”, subrayó Iglesias, quien anunció que deja su escaño de europarlamentario para encabezar la lista de Podemos.
Pero el secretario general de Podemos no olvidó atacar al partido con quien comparte ese carácter de nuevo en el que tanto insistió, Ciudadanos, de cuyos responsables afirmó que “besan el suelo por donde pisan los partidos viejos” y, visto su apoyo “al PSOE de los ERE en Andalucía y al PP de la Gürtel en Madrid”, incluso están dispuestos –dijo– a “gobernar con tramas mafiosas”.
El líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, lamentó el cariz “exageradamente partidista” del Gobierno de Rajoy, que en su opinión ha “abusado de la mayoría absoluta”, se ha mostrado “incapaz siquiera de intentar tejer acuerdos” y ha carecido de “alma social”. En cuanto a Catalunya, “no sólo ha sido incapaz de resolver políticamente las demandas” hechas desde allí , señaló Duran, sino que muchas veces “ha alimentado las posiciones del independentismo. El portavoz saliente de CDC en el Congreso, Pere Macias, juzgó “de chiste” que Rajoy pretenda repetir bajo la tesis de que es lo mejor para España cuando la que termina ha sido “la peor legislatura” en democracia, opinó.
El lehendakari vasco, Iñigo Urkullu, dejó claro su rechazo a que Rajoy continúe al frente del Gobierno; hizo votos porque quien le suceda garantice el autogobierno en Euskadi, y expresó su inquietud por que Ciudadanos y Podemos “sean claves para la gobernabilidad del Estado”.
El líder del PSOE asegura que la continuidad de Rajoy es un riesgo para España Iglesias defiende su territorio y dice que C’s “besa el suelo que pisan los partidos viejos”