La Fira deja en Barcelona y su entorno 2.600 millones al año
Un estudio sobre la actividad de la institución cifra en 40.000 los empleos que crea
Cada año la Fira produce un impacto económico en Barcelona y en su área de influencia (trasciende territorialmente al área metropolitana) de 2.624 millones de euros, que producen un valor añadido bruto de 2.360 millones de euros, el equivalente al 1,21% del producto interior bruto (PIB) de Catalunya. Este es el principal dato que se extrae de un informe realizado por la escuela de negocios Esade para la institución ferial, que se presentó ayer en el Círculo de Economía y en el que también se afirma que la actividad de la Fira genera 40.850 puestos de trabajo que, si no existiera esta entidad, no se habrían creado.
“Es importante tener en cuenta que el turismo de negocios contribuye
EL GASTO DIARIO
a desestacionalizar el turismo de Barcelona y representa una parte importante del gasto turístico de la ciudad y su entorno”, apuntó el director del Instituto de Gobernanza y Dirección Pública de Esade, Albert Serra.
El informe fija en un 40% el número de visitantes internacionales anuales (260.000 personas) que son, a su vez, los que más dinero gastan en la ciudad. Según explicó ayer Serra, el expositor y el visitante internacional se dejan en Barcelona y su “región” –es el término que se utiliza en el estudio– unos 325 euros diarios. El gasto medio de los visitantes o expositores que tienen su origen en España –sin contar Catalunya– es también elevado: unos 200 euros por día. El profesional local se gasta de media, por el contrario, unos 90 euros y el visitante de una feria abierta al público, tan sólo unos 20 euros.
De los 2.624 millones de euros de impacto, un total de 1.021 millones corresponden a gastos de visitantes y de expositores. De hecho, 1.598 millones se contabilizan como gastos directos (restaurantes, hoteles, locales de ocio...), unos 710 millones como gastos indirectos (el sueldo de los camareros, por ejemplo) y unos 316 millones como gastos inducidos (a modo de ejemplo: la fruta que esos días se vende de más en Mercabarna o, incluso, el suministro del papel higiénico). Con respecto a los 40.580 puestos de trabajo que, según el informe, produce la actividad ferial, el 10% se enmarca en sectores como la restauración y el comercio; el 9% en otros como el alojamiento, el ocio y la tecnología, y el 5% en el transporte.
Por otro lado, el estudio también recoge que la actividad llevada a cabo en las instalaciones con-
HACIENDA El informe fija el gasto medio del visitante y el del expositor extranjero en 325 euros El Estado se embolsa 782 millones de IVA, IRPF e impuesto de sociedades
lleva retornos impositivos que se traducen en una recaudación fiscal por parte de la Hacienda Pública de 782 millones de euros anuales procedentes del IVA, el IRPF y el impuesto de sociedades.
Pero más allá del impacto económico, o de la creación de empleo, el estudio destaca lo que se conoce como “los valores sociales de Fira”, en referencia a su papel como dinamizador del tejido productivo o de transformador de su entorno (incluso urbanísticamente hablando), que ha hecho que con su recinto de Granvia haya colaborado en la creación de otro polo económico metropolitano: la plaza Europa. También destaca su papel como cohesionador social, de refuerzo de la marca Barcelona o impulsor de la innovación. “Se hace ciudad. ¿Por qué no hacer el piromusical de la Mercè en Granvia?”, preguntó Serra.
El informe surge a partir del análisis de la actividad llevada a cabo por la institución en el periodo 2012-2014, en el que se celebraron alrededor de 200 actos que contaron con más de 27.000 expositores directos y que recibieron más de dos millones de visitantes. De este periodo de tres años se extraen los diferentes datos a partir de los cuales han trabajado los investigadores de la escuela de negocios. El último informe, el anterior al presentado ayer, es del año 2008, de antes de que llegaran los efectos de la crisis. Entonces, se calculó el impacto económico en unos 2.500 millones de euros.
“Este estudio pone de relieve el papel de motor y de dinamizador de la institución”, apuntó ayer el presidente de la Fira, Josep Lluis Bonet, quien, en su intervención, quiso destacar el papel desempeñado en la Fira por su antecesor, el empresario Jaume Tomàs, fallecido en el 2010. “Yo no creía en las ferias, él fue quien me convenció”, añadió Bonet , que alabó la gestión
profesionalizada del ente desarrollada desde su “refundación” en el año 2000 y que ha hecho que el papel de los políticos haya pasado a un segundo plano en la gestión, aunque sin renunciar a la colaboración público-privada.
“El informe destaca el papel de una institución como punto de encuentro de negocios en Barcelona: un eje claro por la innovación”, añadió el vicepresidente del Círculo, Josep Oliu. “Barcelona tiene una gran marca se ha de mantener”, apuntó. “La marca es muy difícil de crear, muy fácil de perder”, sentenció Oliu.
La idea ahora es ir actualizando el informe, debido a que la institución está en pleno crecimiento. El Mobile World Congress, por ejemplo, en el 2014 produjo 397 millones, aunque este año alcanzó los 436 millones.
EL COMPLEMENTO PERFECTO Las ferias y congresos han permitido desestacionalizar la actividad turística
EL ÁMBITO DEL ESTUDIO El informe de Esade analiza un periodo de tres años en el que se celebraron 200 actos